Proverbios 1 - Biblia de Jerusalem 1976Motivo de los proverbios1. Proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel: 2. para aprender sabiduría e instrucción, para entender los discursos profundos, 3. para alcanzar instrucción y perspicacia, - justicia, equidad y rectitud -, 4. para enseñar a los simples la prudencia, a los jóvenes ciencia y reflexión, 5. Que atienda el sabio y crecerá en doctrina, y el inteligente aprenderá a hacer proyectos. 6. para descifrar proverbios y enigmas, los dichos de los sabios y sus adivinanzas. 7. El temor de Yahveh es el principio de la ciencia; los necios desprecian la sabiduría y la instrucción. Amonestaciones de la Sabiduría8. Escucha, hijo mío, la instrucción de tu padre y no desprecies la lección de tu madre: 9. corona graciosa son para tu cabeza y un collar para tu cuello. 10. Hijo mío, si los pecadores te quieren seducir, no vayas. 11. Si te dicen: «¡Vente con nosotros, estemos al acecho para derramar sangre, apostémonos contra el inocente sin motivo alguno, 12. devorémoslos vivos como el seol, enteros como los que bajan a la fosa!; 13. ¡hallaremos toda clase de riquezas, llenaremos nuestras casas de botín, 14. te tocará tu parte igual que a nosotros, para todos habrá bolsa común!»: 15. no te pongas, hijo mío, en camino con ellos, tu pie detén ante su senda, 16. = porque sus pies corren hacia el mal y a derramar sangre se apresuran; = 17. pues es inútil tender la red a los ojos mismos de los pajarillos. 18. Contra su propia sangre están acechando, apostados están contra sus propias vidas. 19. Esa es la senda de todo el que se entrega a la rapiña: ella quita la vida a su propio dueño. 20. La Sabiduría clama por las calles, por las plazas alza su voz, 21. llama en la esquina de las calles concurridas, a la entrada de las puertas de la ciudad pronuncia sus discursos: 22. «¿Hasta cuándo, simples, amaréis vuestra simpleza y arrogantes os gozaréis en la arrogancia y necios tendréis odio a la ciencia? 23. Convertíos por mis reprensiones: voy a derramar mi espíritu para vosotros, os voy a comunicar mis palabras. 24. Ya que os he llamado y no habéis querido, he tendido mi mano y nadie ha prestado atención, 25. habéis despreciado todos mis consejos, no habéis hecho caso de mis reprensiones; 26. también yo me reiré de vuestra desgracia, me burlaré cuando llegue vuestro espanto, 27. cuando llegue, como huracán, vuestro espanto, vuestra desgracia sobrevenga como torbellino, cuando os alcancen la angustia y la tribulación. 28. Entonces me llamarán y no responderé, me buscarán y no me hallarán. 29. Porque tuvieron odio a la ciencia y no eligieron el temor de Yahveh, 30. no hicieron caso de mi consejo, ni admitieron de mí ninguna reprensión; 31. comerán del fruto de su conducta, de sus propios consejos se hartarán. 32. Su propio descarrío matará a los simples, la despreocupación perderá a los insensatos. 33. Pero el que me escucha vivirá seguro, tranquilo, sin temor a la desgracia.» |