¿Cómo Adorar a Nuestro Dios?

Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor que ante mí se doblará toda rodilla, y toda lengua confesará a Dios. Romanos 14:11

Yo creo que cuando adoramos a Dios, al menos parte del tiempo debemos asumir una postura de adoración. Podemos adorarlo de pie, sentados con nuestros rostros inclinados hacia una comunicación con Él, pero la forma más genuina y sincera de adoración es doblando nuestras rodillas en señal de reverencia y humillación. En esta forma expresamos la actitud de nuestro corazón.

Satanás no puede ver lo que hay en nuestros corazones ni en nuestra mente porque no es onniciente, él no sabe lo que estamos pensando, pero en cambio si ve cuando doblamos rodilla, oye nuestras palabras y sabe que en ese momento estamos teniendo una verdadera adoración.

Filipenses 2:10-11

Para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor; para gloria de Dios Padre. 

Otra forma de adoración es, levantando las manos, cada vez que adoramos a Dios con todas estas señales, el diablo teme y huye porque no puede engañar ni controlar a un adorador.

El puede ver la manifestación de nuestras manos levantadas y sabe lo que sucede cuando nos postramos, pero si no tenemos un corazón dispuesto de nada nos sirven todas nuestras actitudes físicas de adoración; es necesario que todo nuestro ser esté unido en adoración, porque la actitud de nuestro corazón refleja lo espiritual y nuestra actitud física refleja lo natural.

Por esta razón es que la Biblia dice que debemos creer con nuestro corazón y confesar con nuestra boca que Jesús murió y resucitó de entre los muertos.

Romanos 10:9-10

Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.

Corremos el peligro de que nuestras emociones controlen la adoración; en la adoración no deben haber manifestaciones de llanto, dolor, tristeza, esta clase de emociones no pertenecen a la adoración; Satanás puede usar fácilmente nuestras debilidades para evitar que tengamos una adoración profunda.

La adoración debe ir dedicada por entero a nuestro Padre y Señor, los cielos dan testimonio de ella, no solamente Satanás ve las rodillas dobladas tambien las ven los cielos.

Dios nos ve cuando le rendimos verdadera adoración y a medida que lo adoramos, Él va haciendo cambios en nuestra vida y en todo lo que nos rodea.

Apocalipsis 4:10

Los veinticuatro ancianos se postran delante del que está sentado en el trono, y adoran al que vive por los siglos de los siglos…

La escena en el cielo que se describe en esta porción de la Escritura se repite cuando oramos habitualmente,…Hágase tu voluntad, como en el cielo así también en la tierra. Es por esto que debemos seguir el ejemplo del cielo en nuestra adoración mientras estamos aquí en la tierra.

Sé como Cristo, deja que tu adoración sobrepase a tu petición; cambia tu preocupación por adoración y Él cambiará tu vida. ¡¡SOLO ADORALE!!

Equipo de colaboradores del Portal de la Iglesia Latina