Su fe puesta en acción

En un mundo que se desmorona de incertidumbre e inseguridad, debemos aprender a caminar por fe, porque de no ser así, nuestra vida también se desmoronará.

Pero si vive confiando en las promesas de Dios para su vida y no en las explicaciones racionales del hombre, la victoria estará asegurada.
Experimente la combinación explosiva de la fe en el nombre de Jesús y la acción y todo obstáculo que se le presente será derribado. Entonces sí podrá traspasar los límites que le impiden trasformar las riquezas celestiales en realidades terrenales.

Fe que produce milagros
?Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve?. (Hebreos 11.1)

Un milagro es un acto sobrenatural de Dios que rompe el orden de lo común y corriente, es una manifestación del ambiente del reino de Dios para los seres humanos.

Él no desea irrumpir en nuestra vida por accidente sino quiere que usted viva constantemente en un ambiente de milagros. Cuando usted comienza a caminar en ese ambiente ya nada lo sorprenderá. Es un estilo de vida porque sabe que nada es imposible para Dios.

Antes de tener fe debo tener esperanza, porque sin esperanza no puedo tener fe. Si no tiene esperanza en la circunstancia por la que atraviesa entonces tiene que ir a la fuente de la esperanza, que es la Palabra de Dios, porque ella dice que los que creen tienen una esperanza.

La sustancia de la esperanza
Primero tengo esperanza, luego tengo fe. La Palabra convierte mi esperanza en fe. Si usted está enfermo y declara que algún día se va a sanar, Dios hará el milagro. Eso es esperanza. Pero la fe entra como un elemento de sustancia para la esperanza.

Seguramente alguna vez preparó gelatina. En su etapa inicial puede tomar con la mano la mezcla del polvo con el agua y se le deslizará entre sus dedos, pero cuando la pone en el refrigerador se enfría, y minutos después la gelatina está consistente, ya no se escapa entre los dedos.

La fe convierte aquello que espero en algo tangible. Puedo tenerlo en mi mano, tomarlo, y saber que es real aunque todavía no se haya manifestado en el mundo natural. Es necesario tener esperanza para tener fe.

Mi esperanza me dice: ?Dios hará algo?. La fe dice: ?Ya Dios hizo algo?. La esperanza dice:?Algún día seré bendecido?. La fe dice: ?Hoy estoy bendecido?. La esperanza dice: ?Algún día recibiré sanidad?. La fe dice ?Ya tengo sanidad?.

Fe que adora
?Y vino uno de los principales de la sinagoga, llamado Jairo y luego que lo vio, se postró a sus pies, y le rogaba mucho, diciendo: Mi hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para sea salva, y vivirá?. (Marcos 5:22-23)

La primera característica de una fe que produce milagros es una fe que adora, que se postra, se humilla para honrar. Lo primero que tiene que hacer la fe antes de pedir, es llevarlo a adorar. Cuando usted adora al Señor tiene que reconocer que él es la fuente de todo poder, tiene que tener fe, fe que adora, esa es la fe que agrada a Dios.

Fe que no teme
?Mientras él aun hablaba, vinieron de casa del principal de la sinagoga, diciendo: Tu hija ha muerto; ¿para qué molestas más al Maestro? Pero Jesús, luego que oyó lo que se decía, dijo al principal de la sinagoga: No temas, cree solamente?. (Marcos 5:35-36)

La segunda característica de la fe que produce milagros es que no teme. La fe no teme, tiene su mirada puesta en lo sobrenatural.
Si hay fe no hay temor, porque el perfecto amor echa afuera el temor. El perfecto amor es el de Dios y nada podrá apartarnos de él.

Fe que confiesa
?Y entrando, les dijo: ¿Por qué alborotáis y lloráisí La niña no está muerta, sino duerme?. (Marcos 5:39)

La tercera característica de la fe que produce milagros es que confiesa el resultado. Cuando usted confiesa el resultado se eleva a un nivel superior para recibir el milagro de Dios. Usted solamente puede caminar con Dios si está de acuerdo con él. Si continúa proclamando que está en problemas, siempre lo estará, pero la característica de la fe que produce milagros es que habla el resultado.

Fe que aísla
?Y se burlaban de él. Mas él, echando fuera a todos, tomó al padre y a la madre de la niña, y a los que estaban con él, y entró donde estaba la niña?. (Marcos 5:40)

La cuarta característica de la fe que produce milagros es que aísla. Aislarse significa separarse. Cuando tiene fe muchas veces debe aislar su corazón, porque hay gente negativa que vive en un ambiente de incredulidad, y estar cerca de ellos es contagioso.

Mire con quien camina y con quien se vincula, no sea que los incrédulos apaguen la fe que hay en usted y le impidan entrar a lo que Dios le ha prometido.

Fe que desata
?Y tomando la mano de la niña, le dijo... Niña, a ti te digo, levántate?. (Marcos 5.41)
La última característica de una fe que produce milagros es que se puede desatar a través de las palabras y el obrar.

Este artículo ha sido tomado del libro:

Fe explosiva
por Edwin Santiago