¿Eres Realmente Feliz?

Dichosos y Felices son aquellos cuando por mi causa los vituperen y los persigan, y digan toda clase de mal contra ustedes, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos. . . Evangelio de Mateo 5:11-12

Otra de las patologías que acosan la humanidad desgastada y cansada de nuestros días es la pérdida del gozo. Te quiero hacer una pregunta y si estás atento quiero que seas bien sincero contigo mismo: ¿Eres realmente feliz?…

No te estoy preguntando si te diviertes sino, ¿si eres feliz?, No te digo si tienes todos tus fines de semana ocupados en eventos sociales sino, ¿si eres realmente feliz? tampoco te pregunto si te ríes, también los actores se ríen y se suicidan luego de la función.

La felicidad que Dios te ofrece, es un estilo de vida, independientemente de nuestras circunstancias inmediatas. Si la felicidad dependiese de nuestros alrededores, entonces sería tan incierta como una vela ardiendo sin protección en medio de ráfagas de viento. En un momento, la vela arde clara y firme más al siguiente momento la llama salta al mismo borde de la mecha. Pero el gozo de Dios no tiene relación alguna con el efímero contexto de la vida, y por ello no es víctima de un día fugaz. No depende de que un día las personas me valoren y al otro no veo a nadie a mi lado. Porque el tiempo como las personas son mutables, pero el gozo de Dios en el cristiano es constante.

¿Dónde reside el secreto? El secreto está en contar y confiar con la compañía de Dios en todo momento. En cada día, triste o alegre. ÉL lo prometió al decir: «He aquí, yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.». ¿Cuentas con su compañía?

Filipenses 4:4 dice: «Alégrense en el Señor siempre». ¿Cuentas con la presencia del Señor en tu vida? Sólo así obtendrás la firmeza para soportar los embates de la vida sin perder tu ánimo, sabiendo quién está a tu lado. ÉL está dispuesto a acompañarte y tomarte de su mano hasta la eternidad pero la decisión es solamente tuya. Pídele que entre a tu corazón ahora mismo y nunca más se irá de ti. Millones de personas en todo el mundo y en toda época han encontrado en él gozo permanente a pesar de las circunstancias. Tú puedes ser el próximo.

Haz tu oración así:

Dios mío, tu conoces mi corazón y conoces cómo son mis días. Permite que a partir de hoy comience una vida llena de dicha conforme a tu Palabra, en el nombre de Jesús. Amén