Sacando ventajas de la escasez

He escuchado muchísimas veces, que la Escasez es una de las principales razones, por la cual la gente se divorcia, pero considero que es un argumento equivocado, puesto, que en realidad, cuando una pareja llega al borde del divorcio, no es por la escasez de recursos, sino por la mala administración financiera, y la mala comunicación entre ellos.

En mi caso somos una pareja realmente joven en todos los aspectos, hemos estado aprendiendo de todo un poco, e incluso nos hemos llevado golpes de uno y de otro tipo, en todos estos ocho años de matrimonio, pero una de las cosas que hemos aprendido, y hemos estado experimentando en estos últimos tiempos, es la satisfacción que se siente cuando llegamos a ciertos acuerdos juntos.

Al principio, vivíamos en la casa de la familia materna de los padres de mi esposo, y lamentablemente por ser dos familias bajo un mismo techo, era casi imposible, poder separarse los roles de ambos padres de familia, la familia principal, y la familia secundaria, y todo esto al principio se nos vino convirtiendo como en un monstruo de dos cabezas.

Las cosas fueron mejorando, cuando fuimos independizarnos, para poder ir conformando nuestro propio modelo de familia, y nuestro propio modelo de administración de los recursos.

Mayor aun fueron las satisfacciones, cuando pudimos separarnos de casa, y empezamos a vivir solos mi esposo, mi hija y yo, pero aunque nosotros estábamos haciendo bases de como administrarnos nosotros dos, siempre estaban muchos terceros, que aun todavía mi esposo no había cobrado, y ya todos tenia un proyecto de gastos y consumos, que harían con el sueldo de mi esposo, al principio, el siempre se dejaba envolver, y terminaban los demás, teniendo el control del presupuesto de su sueldo.

Paso un tiempo, y con la ayudada de Dios,los mismos resultados, y mis consejos, el se fue dando cuenta de que todos los demás no tenían por que controlar su sueldo, ya incluso mi esposo, no salía de pagar un préstamo, y volver a pedir prestado, para poder subsidiar los gastos que todos los terceros le ocasionaban, y empezó a hacerse el mismo responsable de sacar su presupuesto de como dirigiría sus gastos, pero aun así, siempre había resistencia de afuera, pero el poco a poco lo fue controlando, y aunque y aun siguen siendo su carga familiar, el ha ido aprendiendo a administrarse y los ha ido enseñando a ellos a corregirse.

Entre nosotros hubo un tiempo de gran tensión, porque como esposa yo necesitaba, también conformar parte de sus decisiones, ya que siempre por la mala administración de los otros, y de mi esposo, yo era la mas perjudicada, y siempre mis verdaderas necesidades como esposa, y las de mi hija, e incluso las necesidades de mi hogar y de mi esposo, siempre quedaban supeditada, a lo que los demás terminaban dejando.

Pero Dios fue obrando a nuestro favor y con la ayuda de la comunicación, entre nosotros dos, de la sabiduría con la cual fuimos llegando a muchos acuerdos paulatino, hoy día podemos decir que tenemos un presupuesto armónico, donde el no deja de bendecir a sus familias, no deja de bendecir al Señor con sus finanzas, no deja de bendecir a su esposa e hija, y todavía le alcanza para sus gastos personales, Dios ha sido bueno y aun una vez mas nos ha dado la victoria, en otra de las áreas mas importante de nuestras vidas.

El problema, no es la escasez, el asunto resulta de hacer del Señor el dueño de nuestras finanzas, y el maestro supremo que nos enseñe a como administrar nuestros recursos, y Dios obrara milagros y no ira sacando de la escasez a la provisión, Dios provee, pero si somos irresponsables con los que Dios nos da, no podemos pretender que Dios continúe derramando sus bendiciones en abundancia, porque simplemente lo derrocharemos, y malgastaremos, pero cuando asumimos nuestras responsabilidades y nuestra mayordomía, con sabiduría y obediencia a la palabra, Dios provee aun en la escasez, y luego cuando hayamos alcanzado madurez, nos lleva hacia la provisión.