Jonas, Pablo y sus compañeros a camino de Roma, John Wesley y los Moravianos cruzando el Atlántico e incontables otros, tanto en mar como en tierra, prestaron testimonio el hecho increíble y majestuoso: «el Señor tiene Su camino…  en la tempestad.» Este hecho impresionante puede provocar arrepentimiento en el corazón del pecador y descanso en el corazón del Santo.  Para ilustrar lo según caso, consideremos la siguiente historia: El viejo David Hope vivía en una pequeña hacienda prójima a Solway, una región lluviosa en que se necesitaba actuar con rapidez en determinadas ocasiones, especialmente cuando la cosecha estaba en su final.  Cierta mañana, cuando los campos de David estaban secos y las salsas de trigo prestos para ser recogidos, había acabado su café y cogía las gafas para leer la Biblia en el culto matinal con la familia cuando alguien entró de forma apremiada trayendo la noticia: «está veniendo un viento furioso que echará todo el trigo al mar si lo dejamos sin ¡protección!» «¡Viento!» exclamó David .  «El viento no sacará una paja que haya sido designada a mí.  se sienta y vamos alabar y adorar a Dios.»

El salmista nos escribió que aquéllos que confían en el Señor como el monte de Sion, no se abala.  Cuando conocemos nuestro Dios y creemos en Sus promesas, mismo delante de las muchas luchas y tempestades, descansaremos y confiaremos.  La bendición que aguardamos llegará en la hora cierta y de la mejor manera posible.

¿Por qué nos estremecemos tanto cuando enfrentamos crisis y dificultadesí  ¿Dónde está nuestra fe?  ¿En que tenemos puesto la nuestra confianza?  Es fácil demostrar fe cuando todo está en paz y las cosas acontecen según nuestra vonlunta.Y ¿por qué no actuar de la misma forma cuando los vientos y tempestades soplan en contra de nosotrosí  Al final, no estamos y nunca estaremos solos.  El Señor está con nosotros.
Cuida a nosotros y nos protege.  Está a nuestro lado cuando la brisa suave y mansa acaricia nuestro rostro y también en las horas de tormenta.  Es ¡el Señor!  Todas las cosas se someten a Él.

Si usted está enfrentando vientos y tempestades en su vida, descanse.  Dios también está caminando allí.