La aflicción es una experiencia humana que toca la vida de todas las personas en algún momento. En la Biblia, encontramos innumerables relatos de hombres y mujeres que atravesaron tiempos de gran angustia y dolor. Más aún, junto a estos relatos, también encontramos la constante presencia de Dios, ofreciendo consuelo, esperanza y soluciones divinas. Dios no promete una vida libre de aflicciones, pero sí promete estar con nosotros en medio de ellas, fortalecernos y guiarnos hacia la paz y la restauración.
La aflicción puede surgir de diversas fuentes: enfermedades, pérdidas, conflictos y desafíos personales. Estos momentos de dolor pueden llevarnos a cuestionar nuestra fe y propósito. No obstante, es precisamente en esos momentos cuando podemos experimentar de una manera más profunda el consuelo y la presencia de Dios. Es siempre, a través de sus promesas que, Dios nos asegura que nunca estamos solos y que nuestras aflicciones tienen un propósito y un fin.
30 Promesas Bíblicas sobre la Aflicción
1) Salmo 34:19
«Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Jehová.» Salmo 34:19
2) 2 Corintios 4:17
«Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria.» 2 Corintios 4:17
3) Romanos 8:18
«Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.» Romanos 8:18
4) Salmo 46:1
«Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.» Salmo 46:1
5) Juan 16:33
«Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.» Juan 16:33
6) Isaías 41:10
«No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.» Isaías 41:10
7) Salmo 55:22
«Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo.»
Salmo 55:22
8) 1 Pedro 5:7
«Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.» 1 Pedro 5:7
9) Mateo 11:28
«Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.» Mateo 11:28
10) Jeremías 29:11
«Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.» Jeremías 29:11
11) Romanos 5:3-4
«Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza.» Romanos 5:3-4
12) Salmo 91:15
«Me invocará, y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia; lo libraré y le glorificaré.»
Salmo 91:15
13) 2 Corintios 1:3-4
«Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, que nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.» 2 Corintios 1:3-4
14) Isaías 43:2
«Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti.» Isaías 43:2
15) Salmo 34:17
«Claman los justos, y Jehová oye, y los libra de todas sus angustias.» Salmo 34:17
16) Isaías 61:1-3
«El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya.» Isaías 61:1-3
17) Salmo 23:4
«Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento.» Salmo 23:4
18) Romanos 8:35
«¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?» Romanos 8:35
19) Salmo 107:6
«Entonces clamaron a Jehová en su angustia, y los libró de sus aflicciones.» Salmo 107:6
20) Lamentaciones 3:31-33
«Porque el Señor no desecha para siempre; antes, si aflige, también se compadece según la multitud de sus misericordias; porque no aflige ni entristece voluntariamente a los hijos de los hombres. Lamentaciones 3:31-33
21) 1 Tesalonicenses 3:3
«A fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos.» 1 Tesalonicenses 3:3
22) Proverbios 3:5-6
«Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas.» Proverbios 3:5-6
23) Filipenses 4:6-7
«Por nada estéis afanosos; sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.» Filipenses 4:6-7
24) Santiago 1:2-3
«Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia.» Santiago 1:2-3
25) Isaías 40:29
«Él da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.» Isaías 40:29
26) Salmo 9:9
«Jehová será refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia.» Salmo 9:9
27) 2 Corintios 12:9
«Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.» 2 Corintios 12:9
28) Hebreos 12:11
«Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados.» Hebreos 12:11
29) 1 Pedro 4:12-13
«Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría.» 1 Pedro 4:12-13
30) Salmo 119:71
«Bueno me es haber sido humillado, para que aprenda tus estatutos.» Salmo 119:71
La aflicción es una realidad ineludible de la vida, pero Dios nos ha dado promesas para sostenernos en medio de ella. A través de la fe y la confianza en Dios, podemos encontrar consuelo y esperanza, incluso en medio de la muerte. No debemos temer ni desmayar, porque Dios está con nosotros, guiándonos y fortaleciéndonos. Al confiar en sus promesas, podemos enfrentar la aflicción con valentía y paz, sabiendo que Dios está trabajando en nosotros para bien. Mantengamos nuestra fe firme, sabiendo que la gloria de Dios será revelada en nuestras vidas, y que nuestras pruebas producirán un fruto eterno de justicia y paz.
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