“Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman”. Santiago 1:9-11

El pastor Santiago era un hombre versado en las Escrituras del Antiguo Testamento, él fue uno los autores de las epístolas que más versos cita en sus cartas, por eso cuando lo concibo a Santiago, lo percibo en el templo leyendo con avidez las notas de los profetas e inmediatamente terminando de leer, lo veo que sale raudo a escribir a sus ovejas, todavía con aquellos versos memorizados latiendo en su mente, tan deseoso de transmitir palabra por palabra lo que Dios le habló:

Una voz dice: «Proclama. «¿Y qué voy a proclamar?», respondo yo. Que todo mortal es como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo.

La hierba se seca y la flor se marchita, porque el aliento del Señor sopla sobre ellas. Sin duda, el pueblo es hierba. La hierba se seca y la flor se marchita, pero la palabra de nuestro Dios permanece para siempre.»
Isaías 40:6-8

Ya que el argumento sobre la sabiduría y el argumento sobre el hombre pobre se encuentran entre las dos referencias a las pruebas, es posible que la intención del pastor Santiago sea relacionar a la sabiduría en cuestiones de la posición económica, con el temor de las pruebas. El cristiano pobre que puede sentirse tentado a quejarse contra Dios por su pobreza, debe enorgullecerse de su “alta dignidad” que consiste en haber sido escogido por Dios para ser rico en la fe y heredero del Reino. Por otro lado, el cristiano rico, que puede sentirse tentado a jactarse de su riqueza, debe enorgullecerse de su humilde condición que consiste en la transitoriedad de su vida y de su riqueza.

Hoy temprano hablaba con una mujer que dolida por la prueba que estaba pasando me dijo: ¿Por qué Dios permite que siendo mi hogar cristiano tenga que sufrir? Como acababa de tener mi tiempo con Dios, pude hablarle sobre lo que aprendí ayer con Santiago, cuando eres probado te sientes sumergido en las olas tempestuosas, pero puedes naufragar en ese mar de angustia si caes presa de la angustia y el dolor.

“Alta dignidad” sentir alta dignidad por haber sido escogido por Dios para ser rico en la fe, es algo tan incomprensible, tan difícil de digerir cuando se está pasando por necesidad, traición, enfermedad, sin embargo Dios no se equivoca y si él te escoge para ser afinado, sabe que recurrirás a él para hallar fuerzas espirituales y por ello te sigue probando con amor.
En cambio el rico espiritual, el que cree que lo tiene todo, el que se considera irreprensible y confiado en sus fuerzas, éste se ha dejado broncear demasiado por el sol del orgullo, terminará seco y sin belleza.
¡Que atinado nuestro pastor Santiago! Por eso después de leer las citas de Isaías salió corriendo a su casa y con tinta en mano dejó registrada sus meditaciones para que hoy nosotros tengamos esperanza que si perseveramos con fe y esperanza en medio del dolor, la promesa está escrita, el tiempo no la ha podido desaparecer:

“Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman”.

Dios te da paz en medio del dolor
Martha Bardales