“EL GUARDAESPALDAS”

Y  el que estaba sentado en el trono dijo: “Ahora todo lo hago nuevo”. Luego me dijo “Escribe, que estas palabras son ciertas y verdaderas.”  Y añadió “Ya está hecho. Yo soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin. (Apocalipsis 21,6)

Te  enteras que la casa de tus vecinos ha sido asaltada por los ladrones,  los asesinatos a mano armada aumentan día a día,  la ola de violencia,  aumenta en tu ciudad.  Vives en un estado de alerta máxima,  y te atreves a decir ¡Oh! Y ahora quien podrá defenderme!

Quizás uno de esos tantos anuncios publicitarios en la Televisión te dicen: Lo que tú necesitas es un GUARDAESPALDAS. 

Hablando de guardaespaldas, recordé la historia de dos amigos que se encuentran en la calle uno de ellos era conocido por ser guardaespaldas de ricos y famosos:

-Hola Fulgencio,  me entere que estabas trabajando como guardaespaldas de un millonario.  Comenta Filemón.

Tu  lo has dicho estaba trabajando dice  Fulgencio, el famoso guardaespaldas

¿Por qué te echaron? Pregunta Filemón

Porque a mi jefe se le acerco un tipo y lo golpeo.

Filemón queda asombrado y dice: ¡pero como lo golpeo… ¿Tú no eras su guardaespaldasí

Acabas de decirlo muy claro, yo era su GUARDA- ESPALDAS, pero este tipo lo ataco por el frente y por eso no logre evitar que lo golpearan…

Como podrás entender en situaciones de peligros y adversidades no solo necesitamos a alguien que nos cubra las espaldas, lo que tú y yo necesitamos es  un ALFA y OMEGA.   Es decir alguien que vaya delante de ti, pero que también vaya detrás de ti, protegiéndote y cubriéndote las espaldas.   

En nuestra vida siempre estarán los enemigos del alma, buscando como asaltarla, estos estarán planeando como atacar nuestras debilidades, ellos no cesaran de buscar como robarnos la paz, buscaran quitarnos la fe, la esperanza y el amor.

Ante  estos  peligros  inminentes,  tenemos necesariamente que pedir ayuda Divina, confiados que:  El PODER DE DIOS, nos protegerá, por medio de la fe, con miras a la salvación que nos tiene preparada para los últimos tiempos. (1ra Pedro 1,5)

Cada amanecer tenemos que alzar la mirada a los cielos y esperar el auxilio y protección que viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra (Salmo 121,1-2)

La Buena Noticia ante tanta calamidad e inseguridad es que: Tenemos, pues, promesa y juramento, dos realidades irrevocables en las que Dios no puede mentir y que nos dan plena seguridad cuando buscamos refugio aferrándonos a nuestra esperanza. (Hebreos 6,18)

Cuando ataquen los enemigos del alma, cuando veamos que la situación parece insostenible, en instantes que escuchamos que nuestros enemigos tienen un plan para acabar con nosotros, tenemos que tener  plena confianza, cuando Dios dice a todos los que quieren hacernos daño:

Tracen un plan: fracasara;

Digan una palabra: no se cumplirá;

Porque Dios, está en medio de su pueblo (Isaías 8,10)

Animo hermano, nunca te olvides que no solamente tienes un guardaespaldas  que te protege de todos los que te atacan por sorpresa,  también tienes en tu vida alguien que va delante de ti derribando toda fuerza maligna que quiere destruirte.  Por tanto enfrenta cada día con fe y esperanza con la plena confianza que: “Dios te guarda y protege   al salir y al regresar ahora y para siempre” (Salmo 121,8) Amen.

Autor: Adhemar Cuellar