El Devocional Cristiano – El Saber

«Oro hay, y abundan las piedras preciosas, pero aún más valiosos son los labios del saber.» Proverbios 20:15 (NVI)

La vida es una moneda, decía un viejo tango argentino. Quien lo escribió se veía en la necesidad de comprar bienes y servicios para poder subsistir. Lejos de sus ideales y utopías filosóficas, la sociedad le imponía ciertas normas de conducta para ser aceptado.

Pasaron muchos años desde la primera vez que se cantó ese tango, y la situación social, lejos de mejorar ha empeorado. Hoy vivimos en una sociedad esmeradamente consumista. Somos bombardeados permanentemente por la publicidad para hacernos creer que el valor como personas radica en el tipo de auto que tenemos, en la ropa que usamos, en las zapatillas con las que caminamos o el celular con el que hablamos.

El dinero mueve al mundo, y se hizo imprescindible. Lamentablemente la sociedad dice que somos por lo que tenemos. Billetera mata galán y la moneda manda. Lejos de estar peleado con el dinero, Dios nos hizo para que disfrutemos de una vida placentera y fructífera. Y para ello hace falta dinero. Para darnos un gusto necesitamos plata. Y está muy bien que la tengamos y la disfrutemos.

Pero la Biblia alerta sobre los excesos, y nos advierte que si el dinero se convierte en el centro de nuestra vida, estamos en serios riesgos de fracasar. El dinero es un medio, no es un fin en si mismo. Es valioso y necesario, pero no nos da mayor valor a los ojos de Dios. La viuda pobre había puesto en la ofrenda dos blancas (no alcanzaba a ser 5 centavos de peso), mientras que los fariseos arrojaban grandes monedas que hacían ruido al caer para que todos los vieran.

Cristo dijo que la viuda puso más que todos ellos, aunque financieramente esto sea una equivocación, en el Reino de Dios es una verdad absoluta. No sos valioso por lo que tenés sino que sos valioso por lo que sos. Y Salomón nos recuerda que el valor que tenemos se manifiesta en la forma que hablamos. Por eso nos alienta a tener labios de sabiduría. A hablar con criterio, con armonía, con paz, con cuidado.

Quien puede hablar de esa manera, es alguien que tiene el alma en perfecta sintonía con Dios. Es sabio porque sabe elegir lo bueno de lo malo, y se queda con lo bueno. ¿Cuánto vales para Diosí

REFLEXIÓN – Mostrá tu valor, hablá sabiamente.

«Oro hay, y abundan las piedras preciosas, pero aún más valiosos son los labios del saber.» Proverbios 20:15 (NVI)

Un gran abrazo y bendiciones

Dany