Imitadores de Dios imitadores de Cristo Jesús

«De hecho, todo lo que se escribió en el pasado se escribió para enseñarnos, a fin de que, alentados por las Escrituras, perseveremos en mantener nuestra esperanza. Que el Dios que infunde aliento y perseverancia les conceda vivir juntos en armonía, conforme al ejemplo de Cristo Jesús.» Romanos 15:4-5 (NVI)

Difícilmente podamos encontrar hoy un modelo a seguir. No hablo del económico o político. Sino un modelo para personas. La simpleza mental te hace centrar tu atención en algún deportista o músico. Pero estaba pensando en los patriotas de la revolución de mayo, como ejemplos a seguir. Como Juampi tiene que estudiar ese tema, estuvimos repasando juntos, la historia de Belgrano, de la primera junta y otros temas.

Belgrano era un abogado que quería un gobierno patrio y se vio como general del ejército del norte, con la orden de atacar al sofisticado y profesional ejército español con un rejuntado de buenas intenciones criollas. Ganó tres batallas y perdió tres. Y decía el libro de historia, murió solo y pobre. Patriotismo, sacrificio, amor a la patria, entrega, entusiasmo, fidelidad, principios, tesón, valentía eran las características de aquellos héroes de mayo. Ya no hay modelos así.

Entonces caemos en la mediocridad que vemos a diario. Y nos alejamos de la mejor opción. Pablo sabía lo difícil que era conseguir y mantener buenos ejemplos a imitar y por eso, cuando termina su carta a los romanos, les plantea este desafío.

¿Cuál es el mejor modelo a seguir? Indudablemente es Jesucristo. Y nos propone actuar como Él, sostenidos por la esperanza en la confianza de las promesas del Padre, alentados por la Gracia divina de un Salvador que nos entiende y perseverantes con la pasión del Espíritu Santo.

¿Con qué objetivo? Vivir en armonía, como Dios que es tres y es uno, vive en armonía. Un ejemplo maravilloso para imitar. Copiar a Dios en su forma de actuar, de pensar, de responder, de vivir y de sentir. Alineado en mantener la unidad y el equilibrio en las relaciones.

Esta es la idea de Dios para la iglesia, para la familia, para las relaciones humanas. Y nos plantea un desafío complicado de cumplir porque nuestra conducta está muy lejos de ser así. ¿Qué ejemplo estás siguiendo? ¿Cuáles son tus metasí ¿Cuál es la razón para que actúes de esa manera?

Dios te desafía a ser como Jesucristo. ¿Te animásí

REFLEXIÓN – Alto modelo.

Un gran abrazo y bendiciones

Dany