«SIN PROFECÍA [VISIÓN] EL PUEBLO SE DESENFRENA.» (Proverbios 29:18)

¿Tienes una visión de Dios? lee algunas cosas que eran imposibles

No permitas que la palabra «imposible» te detenga. «Para Dios todo es posible» (Mateo 19:26). Si las personas que han cambiado el mundo hubieran dejado cada tarea «imposible» sin hacer, estaríamos aún viviendo en la prehistoria. Por ejemplo:

(1) Expertos alemanes predijeron que si los trenes circulaban a una velocidad de 40 km/h, esto causaría tales hemorragias nasales que los pasajeros se asfixiarían al pasar por los túneles. Expertos americanos añadieron que necesitaríamos más manicomios porque la gente se volvería loca al ver los primeros trenes.

(2) Cuando YWCA (Asociación Cristiana de Jóvenes) ofreció lecciones de mecanografía para mujeres por primera vez, hubo una gran oposición, basada en la creencia de que la «constitución femenina» se deterioraría ante tanto esfuerzo.

(3) Unos expertos insistieron en que los barcos de acero no flotarían y que el hierro causaría estragos en las orientaciones de la brújula.

(4) En 1797 los granjeros de Nueva Jersey denunciaron el primer azadón de hierro fundido insistiendo que envenenaría la tierra y haría crecer las malas hierbas.

¡Vaya con los «expertos»! Muchos de nosotros estamos más inclinados a creer demasiado poco que demasiado.

La visión es esencial para la supervivencia. La fe la engendra, la esperanza la sostiene, la imaginación la enciende y la Palabra de Dios la fortalece. Es mayor que la vista, más profunda que un sueño, más amplia que una idea. Dirige las cosas fuera del reino de lo predecible, lo seguro y lo esperado. ¡No es de extrañar que sin ella pereceríamos!

El poeta escribió: Cuidado con los que se mantienen a distancia y saludan cada ventura con reprensión. El mundo se detendría si las cosas fueran dirigidas por los que dicen: «No se puede hacer». Si Dios te ha dado visión, ¡dedícate a ella con todas tus fuerzas!