«PADRE NUESTRO [ABBA] QUE ESTÁS EN LOS CIELOS…» (Mateo 6:9)

“El Padre Nuestro» – Parte 1

En los próximos días, vamos a analizar el “Padre Nuestro». El nombre «Abba» significa simplemente «Papíto». Nadie se atrevería a dirigirse a Dios de esa manera; sin embargo Jesús lo hacía continuamente, y nos invita a que hagamos lo mismo. Max Lucado escribió: «Una tarde en la parte vieja de Jerusalén, al salir por la puerta de Jaffa con mi hija Jenna, nos encontramos detrás de una familia judía – un padre y sus tres hijitas. La niña de 4 años quedó unos pasos atrás y no podía verlo. ‘¡Abba!’, gritó. El padre se paró inmediatamente. Sólo en ese momento se dio cuenta de que estaban separados. ‘¡Abba!’, volvió a llamar. Enseguida extendió la mano y ella la agarró. Me hice unos apuntes mentales. Quería ver cómo actuaba un ‘Abba’. Le llevó de la mano con fuerza al descender la rampa. Cuando pararon en una calle muy concurrida, la niña se salió del bordillo y él la atrajo hacia sí. Cuando cambió la señal, la guió con sus hermanas a través del cruce abarrotado. En medio de la calle, se agachó, tomó a la niña en sus brazos y siguieron su camino».

¿No es eso lo que todos necesitamosí ¿Un «Abba» que nos oiga cuando le llamamos, que nos agarre de la mano cuando somos débiles, que nos guíe a través de las encrucijadas complejas de la vida, que nos tome en sus brazos y nos lleve a casa? Pues bien, hay buenas noticias: tenemos uno así. No importa lo que estés enfrentando hoy, lo único que tienes que hacer es parar, levantar los ojos hacia el cielo y susurrar: «Abba», ¡y allí estará Él para ayudarte!