Cristiano eres elegido según la Biblia – Parte 3

“…OS HE PUESTO PARA QUE VAYÁIS Y LLEVÉIS FRUTO, Y VUESTRO FRUTO PERMANEZCA…” (Juan 15:16b)

Algunas veces nos centramos tanto en las luchas que olvidamos que “…el bien y la misericordia (me)[nos] seguirán todos los días de (mi)[nuestra] vida” (Salmo 23:6). Estamos familiarizados con los problemas de Job, pero olvidamos de que, aparte de eso, eran temporales en una vida bendecida. El dolor que José sufrió en la cárcel fue eclipsado por los años de influencia que disfrutó en el palacio.

¿Tienes problemas para disfrutar de las bendiciones porque temes que no duren mucho? Estás tan acostumbrado a los problemas que constantemente estás en tensión; es como estar sentado en una cómoda mecedora sin ser
capaz de echarte atrás y relajarte. Es hora de que dejes de preocuparte ¡y empieces a relajarte! Dios no te ha traído hasta aquí para abandonarte. Él te ha “…puesto para que vay(ái)[a]s y llev(éi)es fruto, y… permanezca” (Juan 15:16b). Alegría y éxito duraderos – ¡este es el plan del Señor para ti!

Escucha: “…quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder…” (Hebreos 1:3b). Dios nunca dice algo acerca de tu vida y luego permite que falle. No, Él dijo: “…así será mi palabra… hará [-cuenta con ello-] lo que Yo quiero…” (Isaías 55:11).

En Génesis 1:14, el Señor dijo: “Haya lumbreras en el firmamento de los cielos para separar el día de la noche…”. ¿Imagina qué? El mismo sol de entonces brilla hoy por la Palabra que lo creó, y brillará también mañana. Ahora bien, si Dios hace esto por un objeto inanimado como el sol, ¿no piensas que Él cuidará de ti también? ¡Vamos, empieza a confiar en Él!