4 Consejos para hacer frente a la pérdida de un ser querido
Vacío, incredulidad, cansancio, confusión, depresión, ira. todos estos sentimientos son parte del duelo. C.M. Parks dijo: «El duelo es el precio que pagamos por amar». Las únicas personas que se escapan del desconsuelo son aquéllas que nunca amaron.
En Juan, capítulo 11, cuando Jesús llegó, Lázaro estaba muerto y Marta estaba alterada porque Él no había venido antes. Ella quería saber:
¿Por qué, Señor?. Ésta es la pregunta que nos hacemos todos ¿Y cuál fue su respuesta? La Biblia dice que sentándose entre los asistentes al funeral, Jesús lloró (Juan 11:35). Y haciéndolo, Él dio «luz verde» para que nosotros también podamos entristecernos.
¿Cómo llevamos el luto? La autora Melody Beattie dijo: «Lo hacemos torpemente, imperfectamente, de mala gana, con ira e intentos de negociar. Titubeamos tontamente, pataleando y gritando, hasta que al final llegamos al estado de paz que se llama aceptación».
Las lágrimas no representan una falta de fe, simplemente significan que somos humanos. Él, que te dio el amor, entiende el pesar y la pérdida; por eso también te dio las lágrimas.
Jesús dijo: «Yo soy la Resurrección y la Vida…» (Juan 11:25), así que, aquel día cuando Él habló, Lázaro tenía que responder al «Señor… de los muertos como de los que viven» (Romanos 14:9). De hecho, si Jesús no hubiera llamado a Lázaro por su nombre, ¡es probable que todos los muertos del cementerio hubieran resucitado cuando Él habló!
Alma afligida, hay buenas noticias: «El Señor… descenderá del Cielo. Entonces, los muertos en Cristo [tus seres queridos incluidos] resucitarán…» (1 Tesalonicenses 4:16). Hasta entonces, aunque nos apenamos, no somos como «…otros que no tienen esperanza» (1 Tesalonicenses 4:13). ¡Y esto es porque sabemos el final de la historia!
«CERCANO ESTÁ EL SEÑOR A LOS QUEBRANTADOS DE CORAZÓN…» (Salmo 34:18)
Al perder a alguien a quien amas, no hay arreglo rápido. La única manera de salir es pasar por ello. Una mujer dijo: «No tenía ni idea de que en el duelo hay involucrados tantos «primeros»: mi primera noche sola, la primera vez que iba sola a la iglesia, mi primer aniversario sola. Y cuando pensé que las cosas ya no podrían ponerse peor, me encuentro enfrentando las vacaciones yo sola; hubiera dado cualquier cosa para poder boicotearlas».
La Biblia dice: «cercano está el Señor a los quebrantados de corazón…» (Salmo 34:18). Él utiliza el apoyo de amigos y familiares afectivos, más el paso del tiempo para ayudarnos a ser sanados. Mientras tanto, aquí hay algunas cosas que puedes hacer:
(1) Cuando sea posible, haz planes antes del tiempo
Cuando estamos entristecidos, no hay un modo «bueno» o «malo» para manejar eventos especiales como cumpleaños, aniversarios y vacaciones. Algunas personas deciden hacer algo totalmente distinto en vez de intentar de mantener viejas costumbres. Haz lo que te siente mejor.
(2) Permite que tu familia en el Señor te ayude
Pasarlo solo, significa generalmente que no irás a ninguna parte, así que trata de alcanzar amigos y creyentes en el Señor. Pídeles que oren con y por ti. Recuerda, los demás no saben lo que necesitas como no se lo digas.
(3) Saca fuerza de las que Dios te quiere dar
El luto puede agotar mucho. Por lo tanto, pídele al Señor que te proteja de consumirte en ello, y que te dé fuerzas cuando te sientas deprimido. La Biblia dice: «Él da esfuerzo al cansado… …los que esperan en el Señor tendrán nuevas fuerzas… (Isaías 40:29,31).
(4) No esperes gran cosa antes de que ocurra
Mantén esperanzas razonables acerca de lo que puedas manejar. Trátate a ti mismo como lo harías a tu mejor amigo – siendo atento y alimentándote bien.
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