Como Mantener Tus Prioridades Según La Biblia

[highlight]»MIRAD, PUES, CON DILIGENCIA CÓMO ANDÉIS…» (Efesios 5:15)[/highlight]

[highlight]Los propósitos de Dios para tu vida deben revisarse, ¡y seguidos!, continuamente. ¿Qué significa esto?[/highlight]

(1) Permanecer flexible

Las circunstancias cambian constantemente así como los métodos para hacer las cosas. De manera que debes mantenerte moldeable para cumplir los designios del Señor para tu vida.

(2) Planificar tu tiempo con cuidado

Para ser efectivo debes ser capaz de planificar el día. Sólo una de cada tres personas lo hace[highlight]. John Maxwell dijo: «Es raro el día que me levanto por la mañana sin saber lo que voy a hacer a lo largo de él». ¿Puedes decir tú lo mismo?[/highlight]

(3) Hacer caso a tu esquema

La mayoría de nosotros no llega a hacer las tareas más importantes hasta la media tarde. Tendemos a terminar primero nuestros trabajos de baja prioridad para tener una sensación de logro. Eso no es de sabios. Haz primero las cosas más importantes. Si planeas tu día pero no lo realizas, los resultados serán iguales como para los que no planean nada en absoluto. Goethe dijo:[highlight] «Las cosas más fundamentales nunca deben estar a la merced de las cosas menos esenciales».[/highlight]

(4) Delegar siempre que te sea posible

Hay dos tipos de personas: los súper involucrados y los que abandonan. Los primeros se niegan a dar la espalda a lo que consideran importante, tanto si están cualificados para ello como si no. Su objetivo es la perfección. Por el otro lado, los que abandonan son rápidos en finalizar las cosas, sin importarles apenas si el trabajo va a ser bien hecho o no. Su objetivo es quitarse las cosas de encima. El delegar adecuadamente exige ser sabio, estar seguro de quién eres ante Dios, y ser generoso para con los demás. Esto significa también que el trabajo se haga como es debido. ¿Y no es esto lo que quieres tú?

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