¿Que Son Las Interrupciones Divinas?

“…¿NO ARDÍA NUESTRO CORAZÓN EN NOSOTROS, MIENTRAS NOS HABLABA…?” (Lucas 24:32)

Los teléfonos móviles, los ordenadores portátiles, las IPADs y los agendas electrónicas se han convertido en nuestros tiranos. Tenemos que hacer un alto y preguntarnos: ‘¿Me puede interrumpir Dios? ¿Puede atraer mi atención normalmente, sin que tenga que ocurrir una catástrofe? Algunas de esas “interrupciones divinas” sucederán mientras estás preocupado por otras cosas. Ora para que seas sensible, puedas darte cuenta de que es Dios el que habla y puedas responderle, en lugar de seguir con las presiones de lo que te rodea. Si decides seguir tu programa en lugar del de Dios, no te sorprendas luego cuando te encuentres en un callejón sin salida y te preguntes: ‘¿En qué fallé?’ ¡La respuesta es que no le prestaste atención a Dios!

Considera a Marta y a María cuando Jesús fue a visitarlas a su casa en Betania. La preocupación de Marta era preparar una buena cena para Él; la de María, escuchar y recibir cada palabra que el Maestro hablara. Ahora bien, las dos cosas son necesarias, pero si tenemos que elegir, el Señor siempre elegirá al que se sienta a sus pies en adoración y aprende de Él. Escucha las palabras de dos personas que acaban de encontrarse con Jesucristo en el Camino de Emaús después de su resurrección, y sin embargo no lo reconocieron: “…¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba…?” (Lucas 24:32). El Señor te puede revelar una solución o una estrategia “en el camino”, la cual será la clave para ese problema que tienes en el trabajo. Puede hacer que tus nervios se calmen para que hagas ese examen del colegio con seguridad en ti mismo. Puede darte dirección para el futuro mientras haces las labores de la casa. Lo único que necesitas es ser sensible a su voz, estar disponible y ser receptivo.