Escritura: Hechos 24:16, Romanos 12:18, Hebreos 12:15, Colosenses 3:23

A menos que permanezcas en la misma iglesia toda tu vida, dejarás un ministerio o iglesia e irás a otro en algún momento, quizás varias veces. De hecho, el pastor promedio en los Estados Unidos se queda en una Iglesia cerca de cuatro años. Como pastor he servido en varias iglesias diferentes en mis años de ministerio y siempre he tratado de salir correctamente. En mi iglesia actual espero servir más años de servicio fructífero. He aprendido, claro, que salir es más bien un arte y a menudo difícil de practicar. Aquí hay 7 conceptos (formas) que he aprendido que me han ayudado a hacer lo correcto en el momento de dejar un ministerio.

1. Ocúpate de tu equipaje (Interior).

Quédate con la conciencia tranquila de que las relaciones se han enderezado, tanto como ha sido posible.

Hechos 24:16 Y por esto procuro tener siempre una conciencia sin ofensa ante Dios y ante los hombres.

Rom 12:18  Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres.

2. No te vayas de la Iglesia molesto o resentido.

Intenta siempre procesar tu dolor. Si luchas con la ira después de que te has ido, busca consejería para evitar una raíz de amargura en tu vida.

Heb. 12:15 Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados.

7 Maneras de Dejar Tu Iglesia Sin Problemas  Y Sin Remordimiento

3. Déjala en el mejor momento.

Es decir, deja tu ministerio lo más sano y fuerte posible. Esto quiere decir, en el mejor momento de crecimiento.

Colosenses 3:23  Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres.

4. Habla bien de los líderes pasados, tanto de los que servían sin nada a cambio, como de los remunerados.

No dejes un rastro de chismes. Niegate a socavar a los líderes o a cualquier otra persona que pueda haberte hecho daño. Los puentes son para cruzarlos, así que No quemes puentes. Viva de tal manera que su reputación y la de Cristo permanezcan intactas.

Prov. 22:1 De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, Y la buena fama más que la plata y el oro.

5. Suelta tu responsabilidad o título.

Ya no estás a cargo. Puede que tengas la tentación de seguir influenciando desde lejos. Cuidate de eso.

6. Ora para que Dios bendiga aún más al ministerio con el nuevo líder que te reemplace.

1 Reyes 1:37 «De la manera que Jehová ha estado con mi señor el rey, así esté con Salomón, y haga mayor su trono que el trono de mi señor el rey David».

7. Entristecerte y llorar es permitido

El cambio trae pérdida. perderás familiaridad, relaciones e influencia aun cuando ganes a aquellos en tu nuevo ministerio. No te sorprendas si lloras o estas triste. El Apóstol Pablo se afligió cuando dejó la iglesia en Efeso por última vez.

7 Formas de Salir de Tu Iglesia Sin Problemas  Y Sin Remordimiento

Hechos 20:35 En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir. Cuando hubo dicho estas cosas, se puso de rodillas, y oró con todos ellos.Entonces hubo gran llanto de todos; y echándose al cuello de Pablo, le besaban, doliéndose en gran manera por la palabra que dijo, de que no verían más su rostro. Y le acompañaron al barco.

Hace años escuche una predica acerca de cómo salir de una Iglesia siendo bendición. Esta cita captura el espíritu de un verdadero líder que entiende el concepto de cuerpo.

Hay una conducta correcta para salir de una Iglesia. Comienza con la visión de reconocer cuando un trabajo, una etapa de la vida, una relación ha terminado – y dejarla ir. Significa dejar lo que se ha terminado sin negar su validez o su importancia pasada en nuestras vidas. Implica un sentido de futuro, la creencia de que cada línea de tu salida es una entrada, que estamos avanzando, en lugar de salir.

Salir de una iglesia es una de las decisiones más importantes en la vida, por esta razón no deberías tomarla a la ligera. Ora a Dios, busca en su palabra la confirmación. Asegurate que sea Él Señor y no tus emociones que te llevan a otro lugar.

Oro a Dios para que Él te ayude en esta tremenda decisión, y que hagas lo correcto al salir de tu iglesia delante de Dios y los hombres.