Preguntas Difíciles Sobre El Avivamiento Personal Para La Gran Comisión

No puede explicarse por casualidad.

Tres personas lo sugirieron en un correo electrónico. Un buen amigo y líder de la Iglesia habló de ello recientemente. Y un pastor lo mencionó en su sermón.

Todos ellos hablaron de la necesidad de que los cristianos en general, y los líderes cristianos en particular, compartan cómo Dios está trabajando en sus vidas para llevar un estilo de vida de Gran Comisión. No debemos esperar un avivamiento de la Gran Comisión a menos que guiemos con el ejemplo.

Estoy condenado.

Reflexionando mirando hacia atrás

En un articulo anterior, escribí sobre la necesidad de mi propio avivamiento de la Gran Comisión. Dos meses después, escuché de varias fuentes diferentes que no puedo ser el líder que Dios quiere que sea a menos que tenga un estilo de vida que refleje mis palabras.

Como resultado, he formulado diez preguntas para mi propia vida. No pienso confesarme y responder a las preguntas de este escrito. Pero ahora estoy respondiendo a Dios sobre cada pregunta.

Pero, sin revelar mis respuestas, les diré que tengo un largo camino por recorrer. Soy consistentemente inconsistente.

Bueno ahora, las diez preguntas:

10 preguntas difíciles para responder

1) ¿Leo y estudio mi Biblia diariamente para saber lo que la Palabra dice sobre el estilo de vida de la Gran Comisión?

2) ¿Oro cada día para que Dios me guíe a un estilo de vida de Gran Comisión?

3) ¿Necesito reconciliarme con alguien para que Dios pueda usarme verdaderamente en el cumplimiento de la Gran Comisión?

4) ¿Estoy dispuesto a cambiar mi estilo de vida materialista para poder dar más y ser menos dependiente de las cosas del mundo?

5) ¿Realmente me preocupo por los pobres y los que sufren en este mundo y en mi comunidad?

6) ¿Mi familia testificaría honestamente que tengo un estilo de vida de Gran Comisión?

7) ¿Tengo un espíritu gentil y amoroso que refleja la presencia del Espíritu Santo en mi vida?

8) ¿Me enfoco y especializo en los niños?

9) ¿Veo la paja en los ojos de los demás sin ver la tabla en los míos?

10) ¿Refleja mi vida una alegría genuina?

Lo que realmente importa

En la iglesia el domingo pasado, hice una serie de preguntas difíciles mientras predicaba desde Jeremías 36. Al final de las preguntas hice esta declaración: «El mundo no nos toma en serio porque no vivimos vidas serias.»

Esas palabras me siguen retumbando en mi cabeza hasta el día de hoy.

¿Estoy viviendo una vida seria para el Evangelio? Esta vida es demasiado breve para jugar a un juego y llamarlo cristianismo. Hay demasiado en juego. La eternidad está en la balanza.

Verás, este escrito es para mí. Si por casualidad lo lees y crees que se aplica a ti, está bien. Pero realmente necesito preocuparme más por mí. Tengo un largo camino por recorrer antes de que pueda reclamar mi propio avivamiento de la Gran Comisión.

Señor, yo elijo seguirte más de cerca. En Tu poder, que mi propia vida refleje las prioridades y pasiones de la Gran Comisión. Y cuando fracase, condenadme y perdonadme para que pueda empezar de nuevo. Que otros me miren y te vean más claramente en mi vida. Para tu gloria Señor, usa mi vida para hacer la diferencia.

Estas cosas oro en el nombre de Aquel que Tú enviaste para que muriera por mí. Es en el nombre de Jesús que yo oro.

Amén.