¿Traicionarás Al Señor Jesús? ¿Qué Dice La Biblia Sobre La Traición?

«Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos» (Lucas 22:31-32).

Al llamarlo Simón, en vez de Pedro (Roca), Jesús pudo haber estado pensando que su discípulo en un momento actuará de según su vieja naturaleza, que es la naturaleza de las debilidades humanas. En el texto griego él «tú» es plural, esto quiere decir que otros también pasarán por la misma prueba. Pero, no debemos olvidar que Jesús oró por todos los discípulos.

He escuchado que el dolor de la traición es uno de los peores dolores que existen y es más cortante que una espada de 2 filos. Creo que esto se debe a que solo un amigo puede traicionarte. Tu enemigo no puede cometer alta traición contra ti. Es por eso que la traición de Judas fue tan dolorosa, porque él pertenecía al círculo de los pocos amigos de Jesús. No por nada, cuando Jesús fue entregado dijo:

Y Jesús le dijo: Amigo, haz lo que viniste a hacer. Entonces ellos se acercaron, echaron mano a Jesús y le prendieron (Mateo 26:50).

Por esta razón es escalofriante pensar que hoy nosotros pertenecemos al círculo de amigos íntimos de Jesús.

Da miedo pensar que tenemos el potencial de traicionar a nuestro Señor. En un momento cantamos «Jesús mi bueno amigo», y luego actuamos como si fuera cualquier cosa menos un amigo. Terminamos actuando como Judas cuando no honramos el nombre de Jesús y manchamos su imagen e integridad.

¿Y Nosotros?, que decimos y pensamos que conocemos íntimamente al Señor Jesús. En vez de gloriarnos en esto este conocimiento, debería preocuparnos a todos que Judas, uno que conocía al Señor tan profundamente, pudiera fallarle al punto de traicionarlo.

Por eso las oraciones de intercesión de Jesús tienen un sentido y propósito. Jesús conoces perfectamente esos momentos en los cuales estamos más propensos a ser tentados a traicionarlo cuando somos desobedientes al extremo. El Señor Jesús con su poder de omnisciencia sabe que nuestra fe en algún momento fallara. Por eso, él oró por Simón Pedro, y por esto él ora por ti hoy.

Piensa en esta realidad: los enemigos del Señor pueden mofarse de él, los agnósticos pueden menospreciarlo y los ateos hasta burlarse de su persona. Más, no olvides, que solo tú, su amigo, puedes traicionar a tu Señor. Para finalizar, no lo hagas, no te atrevas. Una puñalada en la espalda ya fue suficiente para él. Agárrate firme de las oraciones intercesoras de Jesús para contigo, esto te dará todas las herramientas necesarias para amarlo y obedecerlo.

Jesús, mi amado intercesor, te doy gracias porque vives para interceder fielmente por tus hijos, para que ellos puedan estar firmes y fuertes en tu gracia y obedientes a tu voluntad. Mi corazón está lleno de gratitud por estar presente en tus oraciones, por orar para que mi fe hoy no falte. ¡Tú eres mi TODO y no necesito nada más!