Un pastor fue golpeado y su Biblia fue destruida por un grupo de musulmanes en Uganda después de hablar sobre Jesucristo en un funeral.

El pastor Davidson Okirori estaba oficiando un funeral para un miembro de su iglesia, quien era un ex-musulmán, cuando un grupo de musulmanes comenzó a gritar y arrojar piedras hacia él. Los musulmanes gritaron que el pastor era un infiel y que estaba blasfemando contra Alá.

El pastor Okirori fue golpeado hasta desmayarse y su Biblia fue destruida. Fue llevado al hospital, donde se está recuperando de heridas en la cabeza, la espalda y los brazos.

Este ataque es el más reciente de muchos casos de persecución a cristianos en Uganda. Uganda es un país con una población mayoritariamente musulmana, y los cristianos representan alrededor del 30% de la población. Los cristianos en Uganda son frecuentemente víctimas de discriminación y violencia por parte de los musulmanes.

El ataque al pastor Okirori ha sido condenado por líderes cristianos y políticos en Uganda. El presidente Yoweri Museveni dijo que el ataque fue un «acto cobarde» y que los responsables serán llevados ante la justicia.

El ataque al pastor Okirori es un recordatorio de la persecución que enfrentan los cristianos en muchos países del mundo. Es importante que los cristianos en Uganda y en todo el mundo oren por los cristianos perseguidos y trabajen para promover la libertad religiosa.

Como pastor, este evento me desafía a seguir hablando sobre Jesucristo, incluso cuando esto signifique enfrentar persecución. También insto a los cristianos en Uganda y en todo el mundo a orar por los cristianos perseguidos y a trabajar para promover la libertad religiosa.