Mateo 7:24

Que maravilloso, que fascinante la forma en que Jesús enseñaba a la gente, utilizaba lo natural, lo conocido, lo familiar y eso lo aplicaba a su lección.

En ésta ocasión habló de dos casas que fueron construidas, una sobre la roca, y la otra sobre la arena. El hombre sabio, dijo Jesús, es el que oye La Palabra y la hace, o sea el que la pone en práctica. El que construye su fe en la roca siendo obediente a las verdades bíblicas; es aquél que cuando vienen los problemas de la vida, los Sunami, la falta de empleo, enfermedades, separaciones, en vez de lamentarse se refugian en su fe firme para enfrentarlas.

En cambio el necio, lo dijo Jesús, construye su casa sobre la arena; todo está bien, todo es hermoso, pero en realidad su fe es superficial, sin base firme. Por eso, al llegar la primera dificultad, no puede soportar la prueba y todo lo ve negro, se desmorona todo trayendo a su vida, desolación, angustia, soledad, dolor.

Hoy es su día: decídanse a construir su fe en Jesús, comience a apoyarse en La Palabra de Dios, y los vendavales de la vida se llamen como se llamen, no podrán tambalearle, y mucho menos quitarle la paz, por el contrario, estará seguro en quién ha creído Jesús el Señor, CONFIANDO siempre en que ya se acerca la victoria….

Es tiempo de comenzar a confiar más en Jesús, sólo en ÉL esperar, poner nuestra ansiedad en ÉL, y no temer…es nuestra ROCA FIRME…

Señor Jesús: Perdóname por tantas veces que edifiqué castillos en la arena, en éste momento, yo recibo el poder para permanecer fiel a Tus enseñanzas y apartarme de lo pasajero. Me apoyo en Ti que eres la Roca Eterna y te alabo Mi Señor por Tú bendición. Amén.

Mis oraciones, junto a las de ustedes se elevan al Trono

El Señor los proteja y los bendiga