Reflexiones

LEON O CUERVO
Por Dr.  Jose Luis G.

¿ Cazaras tu la presa para el leon?

¿saciaras el hambre de los leoncillos, cuando estan echados en las cuevas.  O se estan en sus guaridas para acechar?

¿Quien prepara al cuervo su alimento.  cuando sus polluelos claman a Dios, y andan errantes por falta de comida?

( Job 38:39-40)

Debido a todos los cambios que la vida ofrece, tanto por los niveles de la salud, las finanzas, la condicion familiar, el trabajo o la situacion de cada pais, a veces nos sentimos leones y en otras ocasiones, cuervos, en algunas nos sentimos aguilas y en otras, unos simples gusanos.

Este dia me visito mi amigo Jimy, un norteamericano de exito en el mundo de los bienes raices, para comentarme que se sentia muy deprimido, porque todo su dinero lo tenia invertido y que no podia vender nada, ya que las ventas de las casas se han estancado, y que al no tener dinero disponible, todas sus cuentas por pagar se le estaban acumulando y que se encuentra a un paso de ser considerado como un «cliente malo».

En ese momento, abri la Biblia y Dios me dio este pasaje:

¿ Cazaras tu la presa para el leon?

¿saciaras el hambre de los leoncillos, cuando estan echados en las cuevas.  O se estan en sus guaridas para acechar?

¿Quien prepara al cuervo su alimento.  cuando sus polluelos claman a Dios, y andan errantes por falta de comida?

( Job 38:39-40)

Lo comparti con el hermano Jimy, el cual cuando las cosas estaban bien, siempre considero que era un leon muy fuerte, y hasta poderoso financieramente, siempre dispuesto para brindar sus diezmos y ofrendas a la iglesia, bien vestido, visita los mejores restaurantes y compra los mejores perfumes.

Ahora estaba convertido en un leon dentro de la cueva, sin dinero, su alma de valiente cazador se vio reducida a un desapercibido cuervo, y su grito de terror mostrando su poder, se volvio el graznido horrible que hace el cuervo cuando canta.

Al darle lectura a la Biblia, vino la esperanza, se quedo maravillado y me dijo que se lo explicara mas despacio, porque se daba cuenta, que el era un leon debilitado, ahora perdido sin su poder, metido en la cueva de la derrota, angustiado, afligido y abatido, pero este pasaje le volvio a la vida, se dio cuenta que Dios tiene misericordia, ya sea que nos sintamos leones o cuervos, Dios siempre vendra a darnos lo que le pedimos.

Se marcho despacio, hasta su forma de caminar habia cambiado, parecia un leon viejo, enfermo, debil y triste.  A los dos horas recibi una llamada telefonica, era Jimy diciendome que cuando llego a su hogar, tenia dos personas interezadas en comprar una de sus casas a la venta y que querian hacerle las ofertas formales.

Cuando nos toca ministrar, y a mi en lo particular, si el caso es triste, tambien me deja triste y luego tengo que recuperarme, en eso estaba, tratando de recuperarme del caso de Jimy, cuando nuevamente me llamo para decirme:

«hermano, lo invito a cenar el lunes al mejor restaurant Italiano de Miami».
—
Devocionales Cristianos www.devocionalescristianos.org