Aquí hay algunos consejos acerca de que esperar y de como manejar los desafíos de tu familia que crece:

Cerciórate de que tu hijo/a se sienta involucrado/a. Haz que tu hijo mayor se sienta involucrado en la vida del bebé. Desde el inicio, siempre refiérete al recién nacido como nuestro bebé, pídele a tu hijo/a que te ayude a conseguir un pañal, reunir los implementos para el baño del bebé, escoger un traje o decidir una canción de cuna para el bebé

Espera que tu hijo/a tenga un retroceso. Un niño/a que aprendió a ir al baño puede tener accidentes y un niño/a que dejo la mamadera puede pedir una de nuevo. Si tu hijo/a continuamente se levanta de su cama y viene a dormir a la tuya, debes mandarlo/a de vuelta a su cama y recordarle en forma suave, pero firme que tu lo/la amas pero que debe dormir en su propia habitación.

Tu hijo/a mayor necesitará su parte de atención en las primeras semanas después de que el bebé llega a casa. Considera el tener un familiar o niñera a la mano para cerciorarte que las necesidades de ambos niños sean satisfechas.

Anima a tu hijo/a a hablar acerca de sus sentimientos. Cuando un hermano/a mayor actúa ayúdale a expresar sus emociones. Dile que esta bien el sentirse molesto/a, pero no esta bien el tirar sus juguetes. Dile que tu sabes que es difícil compartir y reafírmale a él/ella que él/ella es aun muy importante y que tu lo/la amas mucho.