Durante esta semana bien temprano en la mañana, he estado caminando en el parque cerca de mi casa. Durante dos días consecutivos había neblina y casi no se veía nada. El primer día de neblina mientras caminaba, comenzó a despejarse la neblina hasta que desapareció por completo. El otro día de neblina fue diferente. Estaba concentrada en diferentes partes y se iba moviendo poco a poco, pero no se fue del todo, se quedo concentrada en una sola parte mientras yo caminaba.
Comencé a reflexionar sobre los dos días y así es en nuestro caminar cristiano. Por momentos pasamos por situaciones y tormentas en nuestra vida en la cual solo vemos neblina a nuestro alrededor, sin embargo si seguimos caminando teniendo nuestra mirada en Jesús la neblina va a ir desapareciendo o en otras circunstancias aunque un problema o situación se concentre durante un tiempo, sigamos caminando, puesta nuestra mirada en nuestro rey ya que en su momento la neblina va a desaparecer por completo.
Si Jesús reprendió la tempestad y le dijo al mar «calla, enmudece» y se hizo grande bonanza. ¿Qué hará con las neblinas en nuestra vida? En aquel momento los discípulos estaban con Jesús y cuando la tormenta llego se amedrentaron. El Señor desea que tengamos fe en El, no importa la situación por la cual estemos pasando y tener fe en que no importa las circunstancias somos sus hijos y el va a desaparecer la neblina en nuestra vida.
«Porque tu has sido mi refugio. Y torre fuerte delante del enemigo. Yo habitare en tu tabernáculo para siempre; Estaré seguro bajo la cubierta de tus alas.» Salmo 61:3-4
—
Devocionales Cristianos www.devocionalescristianos.org
¿Te gustó este artículo?
Suscríbete a nuestro canal de YouTube para ver videos sobre temas bíblicos.
Visita nuestros cursos bíblicos.
Se miembro de nuestro ministerio y obten todos los recursos.