Que titulo mas bello nos da Dios!! : Nos dice que somos su pueblo, y también que somos sus ovejas. Creo definitivamente que no es fácil ser oveja, porque la oveja es muy mansa y obediente.

Recientemente visite una granja en la Florida, USA, donde tienen cabros y ovejas, y por $ 1.00 le dan a uno un vasito con semillas para dar de comer a los animalitos, uno ingresa al establo, e inmediatamente es rodeado por los cabros, uno de ellos puso sus dos patas delanteras sobre mi pecho, dejandomelas estampadas y con mi camisa » la-coste», desgarrada. Mientras trataba de quitarme al cabro de encima, llego otro y me quito el vasito con su boca y me mordió un dedo. Cuando yo entre, pensé filmar a los animalitos, dándoles de comer, pero, cuando quise tomar mi cámara, otro cabro se estaba comiendo el estuche de la cámara que yo llevaba sobre mi espalda.

Me sente, en una banca enmedio del terreno polvoso, y en ese momento pasaron cuatro cabros corriendo y uno de ellos se paro sobre mi dedo pulgar ( yo andaba en sandalias al estilo del profeta Moises ), el cual quedo desangrado al instante.
Ya recuperado, me puse en pie, busque la salida, la cual hice peleando con los cabros, desde luego, los cuales me acompañaron hasta la puerta, pero logicamente, me iban mordiendo lo que quedaba de mi camisa.

Es logico pensar, que el publico que observo lo que me sucedio, ya no quizo ingresar al area de los cabros.

Luego fui a un riachuelo y me lave mi dedo pulgar, le hice un nudo a la camiseta, por el lado roto, y proseguí el recorrido, hasta llegar a donde estaban las ovejas. Entre con temor, debido a la experiencia con los cabros, pero había una gran diferencia:
Las ovejas estaban quietas, si uno entraba con un vasito de comida, a ellas eso no les importaba, si uno no llegaba a donde ellas estaban , no se mueven a buscarlo a uno, para nada.
Me acerque a una de ellas, le comencé a tocar la lana, la observe a los ojos, y no se conmovió, le toque la cabeza, y tampoco, permanecio quieta llena de ternura y suavidad.

Así es la vida Cristiana. Dios nos llama ovejas de su prado, somos hechos por El, somos diferentes a los cabros. El cabro es destructor, impaciente, y desordenado, en cambio la oveja, es mansa y obediente.

La oveja, aunque la golpees, no dice nada, se queda quieta, y en los peligros busca a su pastor.
Nosotros somos las ovejas de Cristo,
y como pastor, nos cuidara siempre,
nos alimentara, nos dará la salud, y también nos hará llegar todo lo que necesitemos, incluyendo puertas abiertas para que podamos trabajar, obtener finanzas, o también, hacer llover sobre su pueblo, grandes bendiciones, hasta que sobre y abunde, y así, compartir con los demás, las bendiciones que El Buen Pastor nos provea.

Si hoy te sientes abatido, busca a Cristo, nuestro pastor, no olvides que eres su oveja, El no te dejara nunca, Cristo sabe que la oveja es constantemente atacada por el maligno, pero Dios tendrá cuidado de ti, porque sabe que eres indefenso, y que solamente con los cuidados de El, podremos continuar con vida, al servicio de Dios en esta tierra.

Oración:

Amado Dios, te suplicamos por todo tu pueblo, del cual tu eres el Pastor.
Visitanos, y ayudanos.
Como ovejas indefensas, pasamos muchos momentos angustiosos, pero sabemos que tu tienes cuidado de nosotros, y nos enviaras la bendición.
En el nombre de Cristo Jesús

Amen y Amen