32.5 C
Miami
miércoles, julio 17, 2024
Más
    InicioDevocional DiarioMensaje a la Conciencia - «QUIEN NO TE CONOZCA»

    Mensaje a la Conciencia – «QUIEN NO TE CONOZCA»

    Publicado en

    spot_img
    «QUIEN NO TE CONOZCA»
    1 Corintios 6:19 ¿O no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que mora en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestrosí  20 Pues habéis sido comprados por precio.  Por tanto, glorificad a Dios en vuestro cuerpo.
    Había feria en el pueblo al que acababan de llegar tres jóvenes pobres.
    —¿Cómo hacemos para divertirnosí  —preguntó uno de ellos al pasar por una huerta en la que un borrico estaba sacando agua de la noria.
    —Ya sé cómo —contestó otro—: Pónganme a mí en la noria y llévense el borrico al mercado, que seguro que ahí lo van a poder vender en seguida.
    Y así se hizo.  Después que sus compañeros se fueron con el borrico, el que había quedado en su lugar detuvo la marcha.
    —¡Arre!  —gritó el hortelano, que no había visto nada debido a que estaba trabajando a cierta distancia.
    El supuesto borrico no se movió ni hizo sonar la campana.  El hortelano subió a la noria, ¡y cuál no sería su sorpresa al descubrir que su borrico se había convertido en un ser humano!
    —¿Qué es esto?  —exclamó.
    —Mi amo —respondió el joven—, unas pícaras brujas me convirtieron en borrico, pero ya cumplí el tiempo de mi encantamiento, y he vuelto a mi estado original.
    El pobre hortelano se desesperó, pero no tuvo más remedio que quitarle los arreos y decirle que se fuera con Dios.  Luego, afligido, se dirigió a la feria para comprar otro burro.
    Dio la casualidad de que el primero que le procuraron vender era su propio burro, que unos gitanos acababan de comprar.  Tan pronto como lo vio, echó a correr, exclamando: “¡Quien no te conozca, que te compre!”» De ese gracioso cuento procede el dicho con el que damos a entender que como ya conocemos lo que se nos ofrece, no hay modo de que nos lo vendan.
    El hecho de conocer algo a la perfección nos permite rechazarlo porque no nos conviene o porque sabemos realmente de qué se trata, y sin embargo Jesucristo, el Hijo de Dios, hizo precisamente lo contrario en el caso nuestro.
    San Pablo nos enseña que no somos nuestros propios dueños porque hemos sido comprados por un precio.  Y San Pedro nos explica que ese precio es el que pagó Dios para rescatarnos de nuestra vida pasada, no con oro ni con plata, sino con la sangre de Cristo.  ¿Acaso no sabía Dios, cuando decidió pagar el precio supremo enviando a su Hijo al mundo a morir por nosotros, que nosotros no valíamos la pena?  ¿Cómo no iba a conocernos a la perfección el que nos hizo con libre albedrío y por lo tanto propensos a un sinnúmero de imperfeccionesí
    Dios pudo habernos rechazado por el hecho de saber con certeza que se trataba de nosotros con todas nuestras imperfecciones, pero hizo todo lo contrario: mostró su amor por nosotros cuando todavía éramos pecadores y no habíamos hecho nada para merecerlo.
    Pagó un precio muy alto para que pudiéramos convertirnos en príncipes con todos los derechos y privilegios de su reino.  Cristo pudo haber dicho: «¡Quien no te conozca, que te compre!» En cambio, dijo:
    «Te conozco, y sin embargo te compro.» Más vale que no echemos a correr rechazando su oferta, sino que corramos a aceptarla.
    por Carlos Rey

    carlos-rey-quien-no-te-conozco

    «QUIEN NO TE CONOZCA»

    1 Corintios 6:19 ¿O no sabéis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que mora en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestrosí  20 Pues habéis sido comprados por precio.  Por tanto, glorificad a Dios en vuestro cuerpo.

    Había feria en el pueblo al que acababan de llegar tres jóvenes pobres.

    —¿Cómo hacemos para divertirnosí  —preguntó uno de ellos al pasar por una huerta en la que un borrico estaba sacando agua de la noria.

    —Ya sé cómo —contestó otro—: Pónganme a mí en la noria y llévense el borrico al mercado, que seguro que ahí lo van a poder vender en seguida.

    Y así se hizo.  Después que sus compañeros se fueron con el borrico, el que había quedado en su lugar detuvo la marcha.

    —¡Arre!  —gritó el hortelano, que no había visto nada debido a que estaba trabajando a cierta distancia.

    El supuesto borrico no se movió ni hizo sonar la campana.  El hortelano subió a la noria, ¡y cuál no sería su sorpresa al descubrir que su borrico se había convertido en un ser humano!

    —¿Qué es esto?  —exclamó.

    —Mi amo —respondió el joven—, unas pícaras brujas me convirtieron en borrico, pero ya cumplí el tiempo de mi encantamiento, y he vuelto a mi estado original.

    El pobre hortelano se desesperó, pero no tuvo más remedio que quitarle los arreos y decirle que se fuera con Dios.  Luego, afligido, se dirigió a la feria para comprar otro burro.

    Dio la casualidad de que el primero que le procuraron vender era su propio burro, que unos gitanos acababan de comprar.  Tan pronto como lo vio, echó a correr, exclamando: “¡Quien no te conozca, que te compre!”» De ese gracioso cuento procede el dicho con el que damos a entender que como ya conocemos lo que se nos ofrece, no hay modo de que nos lo vendan.

    El hecho de conocer algo a la perfección nos permite rechazarlo porque no nos conviene o porque sabemos realmente de qué se trata, y sin embargo Jesucristo, el Hijo de Dios, hizo precisamente lo contrario en el caso nuestro.

    San Pablo nos enseña que no somos nuestros propios dueños porque hemos sido comprados por un precio.  Y San Pedro nos explica que ese precio es el que pagó Dios para rescatarnos de nuestra vida pasada, no con oro ni con plata, sino con la sangre de Cristo.  ¿Acaso no sabía Dios, cuando decidió pagar el precio supremo enviando a su Hijo al mundo a morir por nosotros, que nosotros no valíamos la pena?  ¿Cómo no iba a conocernos a la perfección el que nos hizo con libre albedrío y por lo tanto propensos a un sinnúmero de imperfeccionesí

    Dios pudo habernos rechazado por el hecho de saber con certeza que se trataba de nosotros con todas nuestras imperfecciones, pero hizo todo lo contrario: mostró su amor por nosotros cuando todavía éramos pecadores y no habíamos hecho nada para merecerlo.

    Pagó un precio muy alto para que pudiéramos convertirnos en príncipes con todos los derechos y privilegios de su reino.  Cristo pudo haber dicho: «¡Quien no te conozca, que te compre!» En cambio, dijo:

    «Te conozco, y sin embargo te compro.» Más vale que no echemos a correr rechazando su oferta, sino que corramos a aceptarla.

    por Carlos Rey

    Pastor Carlos Vargas Valdez
    Pastor Carlos Vargas Valdezhttps://www.devocionalescristianos.org
    Es esposo de la mejor mujer, padre de 2 hijos maravillosos, pastor y director de Desafío Joven. En los últimos 12 años ha trabajado con jóvenes, padres y líderes juveniles. Estudio en Rhema Bible Training Center. Su servicio con la palabra de Dios se ha extendido por más de 27 países en 13 idiomas. Es director ejecutivo y consultor de varios ministerios cristianos, desarrollando conferencias, cursos bíblicos, libros, estudios, devocionales, vídeos y recursos para la vida espiritual.

    Devocional Diario

    LA INTERCESIÓN: ARMA PODEROSA

    La Intercesión: Una Arma poderosa en la Biblia A. Introducción Hoy más que nunca en la...

    Oración de Intercesión

    Hola a todos, qué gusto saludarlos, bueno el motivo de este e-mail es pedirle...

    5 Caracteristicas de la Iglesia Primitiva En La Biblia

    La Iglesia Primitiva: Una Iglesia de Oración (Hechos 1:14) Los discípulos se reunían unánimes. Este...

    ¿Cómo sembrar amor, fe y oración para las nuevas generaciones?

    “Yo os he enviado a segar lo que vosotros no labrasteis; otros labraron, y...

    La Sabiduría en Silencio: Aprendiendo de Job en la Biblia

    ¿Qué es lo único que necesitamos saber bajo cualquier circunstancia en la vida? La...

    Jesucristo, el amigo fiel y el mejor abogado

    En los momentos más oscuros de Su vida terrenal, Jesús experimentó la traición, el...

    66 Versículos Bíblicos Claves Para Cada Libro de la Biblia: Cuadro Explicativo

    Versículos Importantes De Todos Los Libros de La Biblia: Desde Génesis a Apocalipsis (Tabla...

    Mas estudios como este

    Significado de EGLÓN Según La Biblia | Concepto y Definición

    EGLÓN Significado Bíblico ¿Qué Es EGLÓN En La Biblia? 1. Rey de Moab que oprimió a...

    Devocionales Cristianos – La Historia del Juego Monopolio

    Durante la Depresión, Charles Darrow no conseguía encontrar trabajo. A pesar de estar sin dinero y de su esposa estar esperando un bebé, él no se mostró desalentado. Todas las noches se divertía con un juego inventado por él. El juego le recordaba unas vacaciones felices que habían tenido en otra

    Comprender

    La Biblia y El Divorcio Jesús les contesto: No todos pueden comprender esto, sino únicamente...

    Significado de QUENAZ Según La Biblia | Concepto y Definición

    QUENAZ Significado Bíblico ¿Qué Es QUENAZ En La Biblia? (DHH, NVI, PDT, TLA) Ver Cenaz.

    Versículos Bíblicos Sobre Vanidad

    Versículos de la Biblia Sobre Vanidad En La Reina Valera 1960 Éxito causa orgullo y...

    Un Mensaje a la Conciencia – Una Bala en la Cabeza – por el Hermano Pablo

    Llevaba diez años de sufrir dolores de cabeza. Primero pensó que era exceso de trabajo. Después le dijeron que podría ser migraña. Un médico le diagnosticó sinusitis. Pero Bruce Levón no hallaba alivio de ninguna manera, y por fin le sacaron una radiografía. El resultado fue interesante. Bruce tenía una bala incrustada en la base del cráneo.

    Significado de PAN DE LA PRESENCIA Según La Biblia | Concepto y Definición

    PAN DE LA PRESENCIA Significado Bíblico ¿Qué Es PAN DE LA PRESENCIA En La Biblia? (LBLA,...

    Lucas 2:21 Explicación | Estudio | Comentario Bíblico de Matthew Henry

    Estudio Bíblico | Explicación de Lucas 2:21 | Comentario Bíblico Online Nuestro Señor Jesucristo, al...

    Significado de QADÉS Diccionario Bíblico Teológico Gratis

    ¿Qué Significa QADÉS En La Biblia Según El Diccionario Bíblico Online? (Lugar Santo), QADÉS-BARNEA (Lugar...

    Significado de CAINÁN Diccionario Bíblico Teológico Gratis

    ¿Qué Significa CAINÁN En La Biblia Según El Diccionario Bíblico Online? 1. Hijo de Enós;...