Devocionales Cristianos – ¿Cambio climáticosí

Las sombras tiemblan en lo profundo, los mares y cuanto en ellos mora. El extiende el norte sobre vacío, Cuelga la tierra sobre nada. Ata las aguas en sus nubes, Y las nubes no se rompen debajo de ellas. El encubre la faz de su trono, Y sobre él extiende su nube. Las columnas del cielo tiemblan, Y se espantan a su reprensión. El agita el mar con su poder, Y con su entendimiento hiere la arrogancia suya. Su espíritu adornó los cielos; He aquí, estas cosas son sólo los bordes de sus caminos ¡Y cuán leve es el susurro que hemos oído de él! Pero el trueno de su poder, ¿quién lo puede comprender? Job 26.
¡Y esto es sólo una muestra de sus obras, un murmullo que logramos escuchar! ¿Quién podrá comprender su trueno poderoso?

Ahora que las comunicaciones nos tienen al tanto de lo que sucede en lugares distantes al nuestro parece que más nos asustamos cuando con solo un simple movimiento del mouse en el buscador del Google nos enteramos por ejemplo de los famosos cambios climáticos que parecen dejar ver una naturaleza iracunda nunca antes conocida.

Las fuerzas de la naturaleza apenas nos dan pequeñas pistas del poder inmensurable de Dios, lo que Dios ha revelado tocante a su poder sobre las fuerzas naturales y sobrenaturales es simplemente una mínima muestra de su extraordinario poder y pienso que antes de sobrecogernos o llenarnos de temor frente a l mucho frío o el intolerable calor, debiéramos ver en estas expresiones de la naturaleza el gran poder de Dios: «Porque desde la creación del mundo las cualidades invisibles de Dios, es decir, su eterno poder y su naturaleza divina, se perciben claramente a través de lo que él creó» Dios siempre nos quiere llamar la atención con sus expresiones físicas de nubes cargadas, mares agitados, truenos poderosos, ríos impetuosos y rayos candentes del sol, llama la atención de sus hijos, hijos quienes reconocen que el Creador de todo quiere desplegar ese mismo poder para hacer milagros, bendecir tu tierra, sanar corazones.

No te quedes mirando sorprendido los cambios climáticos, esto es sólo una pequeña muestra, un murmullo que logras escuchar sobre el gran poder de Dios, Dios pone a nuestra disposición todo ese gran PODER en el recurso de la oración. ¡Brame el mar y todo lo que él contiene; el mundo y todos sus habitantes! ¡Batan palmas los ríos, y canten jubilosos todos los montes! Canten delante del Señor, que ya viene a juzgar la tierra. Y juzgará al mundo con justicia, a los pueblos con equidad. Oremos y el poder de Dios se desplegará y veremos más maravillas que sólo frío y calor, oremos y Dios convertirá el desierto en tierra fértil, calmará los truenos y el silbido apacible de su voz nos seguirá dando de su paz.
El Señor hace todo lo que quiere en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos sus abismos. Levanta las nubes desde los confines de la tierra; envía relámpagos con la lluvia y saca de sus depósitos a los vientos. El Nombre del Señor es Eterno; ciertamente el Señor juzgará al mundo pero de sus siervos tendrá compasión.

Hace dos miercoles le dije a los hermanos asistentes al culto de oración que llevo muchos, muchos años orando por miles y miles de motivos, claro que he visto el poder de Dios desplegado de muchas maneras, sin embargo en los dos últimos años he hecho un gran descubrimiento al orar con la palabra de Dios, al orar confesando y creyendo en su gran PODER, al orar y no descansar hasta ver el milagro concedido, he aprendido a ser terca, pero en el buen sentido, he aprendido a orar sin cesar. Desde entonces he visto al Rey de los Mares, he contemplado al que tiene las ventanas de los cielos, al que hace llover, la tierra temblar, sé que Dios es poderoso para hacer más de lo que pedimos, solo una pequeña muestra les doy: nuestros jovencitos por quienes oramos, están cada vez más enamorados de Dios.

Hermanos, únete a la congregación que no solo asiste, únete a la iglesia que ora, los miembros no son súper espirituales, no son dotados ni hacen milagros, sólo tienen fe y es Dios quien hace los grandes milagros, únete mi hermana a las mujeres que claman día y noche por sus hijos, únete joven a la generación que esta trayendo el avivamiento a la nación, únete y deja de ser un espectador, Dios quiere que te conviertas en un guerrero de oración.