Aprender a caminar por fe. Parte 2

«CREO; AYUDA MI INCREDULIDAD» (Marcos 9:24)

Otra cuestión importante para considerar: ¿Qué significa «caminar por vista» (2 Corintios 5:7)? Es vivir la vida de acuerdo a lo que ven nuestros ojos naturales; es tomar decisiones y actuar en base a nuestra percepción y a las circunstancias, en lugar de seguir la Palabra de Dios; es ser dirigido por nuestros pensamientos y sentimientos. Éstos son parte de ti, te pertenecen; examínalos y no dejes que te dominen. Usa el temperamento controlado por el Espíritu para que los dirija. Muchas veces nos encontramos atrapados entre la fe y la duda; es como un círculo vicioso entre lo que dice nuestra mente carnal y nuestro espíritu transformado. Un día un padre angustiado le trajo a su hijo enfermo a Jesús para que lo sanara. Éste le dijo: «…Para el que cree, todo es posible» (Marcos 9:23). Entonces el padre respondió: «Creo; ayuda mi incredulidad» (Marcos 9:24).

Muchas veces nos debatimos entre la fe y la duda. El hombre del Evangelio fue sincero y expresó su incertidumbre; con todo y con eso, Jesús le hizo un milagro. Si hubiera necesitado corrección, Jesús le habría corregido. Si su fe no hubiera sido genuina, el Señor lo habría discernido. Sin embargo Jesús aceptó su declaración de fe, a pesar de la falta de certeza. De este episodio podemos aprender algo:

1) No te dé miedo reconocer tus dudas.

2) No dejes que las dudas opaquen la fe. Dios te revelará Su voluntad para una situación determinada a través de una Palabra; aférrate a la misma.

3) Entrega tus dudas al Señor y dile: ‘Creo; ayuda mi incredulidad.’ ¿Cuánto se tarda para aprender a caminar por fe? ¡Toda una vida!