Una de las víctimas fatales del atentado en Boston, Niño cristiano de 8 años fue fotografiado pidiendo paz

El atentado terrorista en la maratón de Boston quito la vida de tres personas, y dejo otras 176 heridas. Una de las víctimas fatales era el niño cristiano Martín Richard, de 8 años.

Según las informaciones, el esperaba la llegada de su papá al final de la corrida al lado de su mamá y 2 hermanos, a pocos metros de la linea de llegada, donde la primera bomba exploto.

Una foto un poco antigua, en la que Martín sostiene un cartel pidiendo paz y el fin de los atentados, fue publicada en el Facebook por Luciana Brawley, una mujer que se identifica como amiga de la profesora de Martín.

En el comentario de la imagen, ella escribe la tragedia que ocurrió con el niño: «Éste es Martín, 8 años. El murió en las explosiones en Boston dos días atrás. El estaba en la linea de llegada con su familia, esperando a su papá llegar. La mamá y la hermana de Martín fueron heridas severamente. El era un alumno de nuestra querida amiga, Rachel Moo. Su mensaje suena con mucha fuerza en este día. Mi oración es para que todos vivamos de acuerdo con las palabras de Martín, pagando tributo a su vida tan breve, pero muy valiosa, siguiendo su ejemplo»

En el cartel que Martín sostiene en la foto, hay un dibujo de corazones y un símbolo de la paz, así como un pedido: «Basta de herir a las personas. Paz»

Según las informaciones de los periódicos de Boston, la madre y la hermana sufrieron heridas graves y aun continúan internadas, milagrosamente el hermano mayor escapo ileso. La prensa local dice que la hermana habría perdido una pierna, y la madre habría pasado por una cirugía cerebral.

El presidente norte-americano afirmo que las explosiones están siendo tratadas como terrorismo: «El FBI esta investigando esto como un acto de terror. No sabemos quien realizo este ataque, no sabemos si fue un grupo extranjero o nacional, o si fue acción de un individuo. Cada vez que son usadas bombas contra civiles inocentes, se trata de acto terrorismo…Este fue un acto atroz y cobarde», dijo Barack Obama.