«…PARA ESTO FUISTEIS LLAMADOS… PARA QUE SIGÁIS SUS PISADAS» (1 Pedro 2:21)

Reflexiones Cristianas: ¡Hazme como Joe!

¿Hasta qué punto te has comprometido de seguir a Cristo? Antes de contestar, lee esta historia de Tony Campollo: «Joe era un borracho, convertido milagrosamente en una campaña de evangelización llevada a cabo en los barrios bajos de la ciudad. Antes de entregarse al Señor, se había ganado la fama de marginado y sucio borrachín para el que no había esperanza. Pero después de su conversión a Cristo, todo cambió.

Joe llegó a ser la persona más afectuosa del centro. Pasaba sus días allí, haciendo lo que hacía falta. Todo lo que se le pedía lo hacía, sin sentirse humillado. Ya se tratara de quitar los vómitos de algún alcohólico enfermo o de limpiar los retretes después de que los hombres los habían dejado sucios, Joe lo hacía todo con un
corazón agradecido. Se podía contar con él para dar de comer a cualquier hombre que entró después de vivir en las calles como un vagabundo; le desvestía y lo metía en la cama si era incapaz de valerse por sí mismo.

Una tarde, después de que el director del lugar había impartido su mensaje evangelístico a la multitud de siempre – compuesta de hombres tristes y cabizbajos – uno de ellos levantó la mirada, se acercó al altar y se arrodilló para orar, aclamando a Dios para que le ayuadara a cambiar. El borracho arrepentido se mantuvo
gritando: «Oh Dios, ¡hazme como Joe! ¡Hazme como Joe!». El director se inclinó y dijo: «Hijo, sería mejor que oraras pidiendo ser como Jesús». Después de pensar por unos momentos, el hombre levantó la vista con expresión inquisitiva y preguntó: «¿Es Él como Joe?».

¿Ven los demás a Jesús en ti?