«…EL JUSTO ESTÁ CONFIADO COMO UN LEÓN» (Proverbios 28:1b)

¿Cristiano, necesitas coraje?

Rosa Parks era una cristiana comprometida y la madre del movimiento por los derechos civiles. Fue arrestada en 1955 por no ceder el asiento a un hombre blanco en un autobús. Hubo boicots y derramamientos de sangre hasta que al fin la Corte Suprema declaró inconstitucional la segregación racial. En su obra Quiet Strength
(‘Fortaleza Silenciosa‘) Rosa escribiá:

«Saber lo que hay que hacer elimina el miedo. Aquel día, cuando me senté en el autobús, no sospechaba que aquello pasaría a ser parte de la historia; sólo pensaba en llegar a casa. Pero lo tenía claro. Después de muchos años de que mi pueblo fuera víctima de maltratos, no ceder mi sitio y lo que tuviera que enfrentar después, no tenía importancia. No sentí ningún miedo. Presentí que el Señor me daría la fuerza para soportar todo lo que tuviera que enfrentar. Había llegado la hora de que alguien se levantara o, en mi caso, se quedara sentada».

En el epitafio de John Knox puede leerse: «Aquí yace un hombre que nunca temió a un rostro de barro». En la Abadía de Westminster, en Londres, un memorial a Lord Lawrence reza así: «Temía al hombre tan poco por su gran temor de Dios». ¿Te gustaría ser recordado así?

La Palabra de Dios dice: «…el justo está confiado como un león» (Proverbios 28:1b). Incluso cuando no te sientes muy valiente, recuerda siempre que el coraje no es la ausencia de temor, ¡sino el saber dominarlo! David dijo: «¡Espera en el Señor! ¡Esfuérzate tu corazón!» (Salmo 27:14). Cuando tu causa es justa y se la encomiendas a Dios, Él te va a dar la valentía que necesites para actuar. ¡Cuenta con ella!