«EN UNA CASA GRANDE HAY UTENSILIOS… UNOS SON PARA USOS HONROSOS, Y OTROS PARA USOS COMUNES» (2 Timoteo 2:20)

4 Pasos prácticos para ser usado por Dios en sus más altos designios

La mayoría de nosotros tiene utensilios de uso diario y utensilios para ocasiones especiales. Escucha: «En una casa grande hay utensilios de oro y de plata… de madera y de barro; unos son para usos honrosos, y otros para usos comunes… si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor para toda buena obra» (2 Tim. 2:21). Esto no se refiere a la salvación; como cristiano ya estás en la casa. No. Esto se refiere a la pureza de tus actos; si no son puros, puedes quedarte con los detergentes y los paños en los fregaderos, porqué Dios no puede utilizar vasos sucios en lugares de honor. Si eres un vaso de barro en restauración que está dispuesto a «esforzarse por conseguir el oro» para ser usado por Dios en sus más altos designios, comienza por hacer estas cosas:

(1) Edifícate

«…edificándoos… orando en el Espíritu» (Judas 20); éste es una habilidad fundamental para la supervivencia.

(2) Practica la santidad

Tienes que practicarla porqué ésta no viene naturalmente. Empieza por controlar tus estados de ánimo… alabando cuando quieras quejarte… buscando hacer el bien… deleitándote en la Palabra de Dios.

(3) Permanece fiel.

Job dijo: «…si me prueba, saldré como el oro» (Job 23:10b). Cuando permaneces fiel, sales de las pruebas más fuerte y más sabio.

(4) Examina tus motivos.

La Biblia dice: «…el fuego… probará… la obra…» 1 Corintios 3:13b,14). ¡Ten cuidado! Las obras buenas realizadas con motivos incorrectos serán quemadas como la madera, el heno y la hojarasca (Ver 1 Corintios 3:12,13).

¡Pero el oro es resistente al fuego! Así que, hoy, «¡esfuérzate por conseguir el oro!»