Para reflexionar – Agarrando En las Manos De Dios

Los pastoreó con la pericia de sus manos Salmos 78:72

Un predicador estaba cruzando una animada calle de una grande ciudad, Con él estaba su hijito de tres años de edad que confiantemente agarraba su mano sin sentir ningún miedo,Existían muchas cosas para ver y el niño intentaba ver todas. En el instante en que atravesaban una calle con gran transito, el niño entretenido en mirar algo que ya había pasado, por estar mirando atrás, acabo tropezando y eso era fatal porque los coches estaban avanzando en ambas las direcciónes. En los segundos siguientes el niño estaba balanceando con los pies en el aire seguro firme por su padre lo Coloco nuevamente en el suelo, ya equilibrado el niño sabiamente se volteo para su padre y le dijo: Papa yo agarré su mano muy bien, El padre replico así es hijo.

Y tu no estas contento por tu padre celestial que te tiene agarrado? .

Como es bueno saber que atravesando las movidas calles de nuestras vidas podemos caminar tranquilos y despreocupados sabiendo que nada de mal podrá acontecernos porque estamos agarrando firmemente las manos de nuestro Padre querido.

En él tenemos confianza y sabemos que nos cargará a lugares planos y seguros aun cuando inadvertidamente desviemos nuestras atenciones o miremos para detrás dejando de fijar nuestro objetivo, sabemos que él nos va auxiliar y nos colocara nuevamente de vuelta al camino de nuestras victorias.

Si tenemos que atravesar la calle de nuestra inseguridad agarremos la mano de Dios. Si la travesía es la avenida de nuestras dudas agarremos la mano de Dios, Si aun tenemos que cruzar la carretera de nuestras aflicciones continuemos agarrando firmes las manos de Dios, Agarrando sus manos, atravesaremos hasta un grande desierto sin cualquiera problema o temor, Al final no solo nosotros estaremos agarrando las manos del Señor — Si no él estará agarrando nuestras manos.

Estemos seguros en las manos del Padre y vamos enfrente

Paulo Barbosa Un ciego en el Internet