¿Qué Pasó Con María Después De La Crucifixión De Jesús?

María En La Cruz

María estuvo absolutamente presente en la muerte de su Hijo Jesús, según los registros del evangelio de Mateo, «también hubo muchas mujeres mirando de lejos, las cuales habían seguido a Jesús desde Galilea, entre los cuales estaban María Magdalena, María la madre de Santiago, José y la madre de los hijos de Zebedeo» (Mateo 27:55-56).

¿Podemos imaginar el dolor que María sintió mientras observaba 6 horas las torturas que sufría Jesús en la cruz? ¿Qué pensó durante las tres horas de oscuridad que cubrió Jerusalén cuando Jesús colgaba en agonía en la cruz?. Lo que debe haber sentido solo Dios podía saberlo.

¿Qué pasó con María la madre de Jesús después de la crucifixión?

Juan se encarga de María

Durante los capítulos finales del pasaje de la Escritura sobre María, no hay ninguno que mencionan a María después de esto, el Apóstol Juan registra Que «Estaban junto a la cruz de Jesús su madre, y la hermana de su madre, María mujer de Cleofas, y María Magdalena. Cuando vio Jesús a su madre, y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo. Después dijo al discípulo: He ahí tu madre. Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su casa» (Juan 19:25-27).

Hay algunos puntos importantes en estos versículos. Por un lado, Jesús no llama más a María, madre, pero si le dice: «mujer», que es un término de respeto, pero que también diferencia que María ya no será más la madre de Jesús, pero Jesús se ve ahora como el Salvador de María (como lo es para todos nosotros). Además, al parecer, Jesús encarga al joven apóstol Juan para el cuidado de María. Esto puede indicar que Jesús había estado cuidando de ella y ahora quiere que Juan haga lo mismo. Jesús miró a Juan y le dijo: ¡He aquí a tu madre! Y a partir de esas horas el discípulo la recibió en su propia casa» (Juan 19:27) lo que en efecto, Juan haría por María lo que haría por su propia madre.

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María Después de la Cruz

La última mención en la Escritura sobre María, la madre de Jesús, se encuentra en Hechos 1:13-14, donde los discípulos «Todos estos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos» (Hechos 1:14). Esto demuestra Que María, la madre de Jesús, se había unido a los discípulos y fue parte de la iglesia primitiva. No sabemos cuánto tiempo vivió porque la Biblia simplemente no lo dice.

Hay algunos historiadores de la Iglesia católica que afirman que Jesús se apareció primero a María, y solo entonces, a los otros, pero esto no parece encajar con las escrituras, ya que había dos mujeres que fueron a la tumba y encontraron que la piedra fue quitada. Sería sorprendente que María fuese la primera en ver al Cristo resucitado, pero las escrituras nada dicen sobre esto. La conclusión es que simplemente no sabemos lo que le pasó a María después de la crucifixión.

Sabemos que se convirtió en parte de la iglesia del Nuevo Testamento y que el apóstol Juan se preocupaba por ella. Eso es, básicamente, en la medida de lo que sabemos acerca de María después de la cruz. Aparte de estos hechos, no es prudente especular o hacer hipótesis, ya que la mayor parte sin duda podría estar equivocada y dejar las cosas a la especulación humana es un terreno peligroso en el cual estar de pie sobre cualquier asunto dogmático.

Conclusión

Qué le pasó a María no es tan importante con lo que sucederá con usted si nunca ha confiado su vida a Cristo. Si la persona ha nacido de nuevo, entrará en el reino algún día y podrá preguntarle a María por sí mismo. Hasta que esto suceda, solo podemos centrarnos en lo que sabemos y esto es que Jesús vino a morir por los pecadores y esto nos incluye todos y cada uno de nosotros.

Afortunadamente, el pie de la cruz esta a nivel del suelo. María no tuvo ventajas con respecto a cualquier persona, ya que cada uno que pone su fe en Cristo y cree en él, tiene vida eterna. A continuación, usted puede saber qué le sucederá después de la muerte. Si no es así, la Biblia deja en claro lo que le depara el futuro si no coloca su confianza en Cristo (Ap 20:12-15).