TODO LO QUE HAYÁIS DE HACER, HACEDLO LO MEJOR POSIBLE (Colosenses 3:23 Castilian)

¿Cómo Dar Siempre Lo Mejor de Ti Mismo?

Una de las obras maestras más famosas de Miguel Ángel es su escultura de David. Trabajó en ella con tal pasión que a menudo dormía en sus ropas de trabajo para no perder tiempo en vestirse y desvestirse. Examinaba y medía el mármol una y otra vez para ver qué pose podría acomodar mejor.

Hizo cientos de esbozos de diferentes posturas y detallados dibujos de modelos. Hizo pruebas en cera a menor escala y sólo cuando estuvo totalmente satisfecho y seguro de lo que quería, tomó el cincel y el mazo.

Con ese mismo esmero e intensidad abordó la obra de la Capilla Sixtina. Tumbado en posiciones muy incómodas en superficies duras, respirando el aire tóxico debajo de la cúpula, se le inflamaron los ojos y se le irritó la piel por el polvo de la escayola.

Durante los cuatro años que duró la obra, sudó la gota gorda y padeció físicamente; ¡pero mira lo que produjo!

El doctor Martín Lutero King, dijo:

Si alguien es llamado a ser un barrendero, debería limpiar las calles como Miguel Ángel pintaba, o como Beethoven componía música, o como Shakespeare escribía poesía.

Debería barrer las calles tan bien que las huestes celestiales y terrestres se tengan que parar y digan: «Aquí vivió un gran barrendero que hizo bien su trabajo».

Si no te apasionas por lo que haces, ¡busca algo que te apasione! No te conformes con luchar por hacer dinero, sino procura marcar la diferencia.

Tu meta debería ser el hacer algo significativo y perdurable, no la mera supervivencia.

Al final: ¿Cómo Dar Siempre Lo Mejor de Ti Mismo?

Pablo nos ofrece la razón fundamental para dar siempre lo mejor de nosotros mismos:

«Todo lo que hayáis de hacer, hacedlo lo mejor posible». Porque en realidad es a Cristo el Señor a quien estáis sirviendo. (Colosenses 3:23-24 Castilian)