“GUARDAOS DE HACER EL BIEN MOVIDOS… POR EL ANSIA DE QUE LA GENTE OS VEA” (Mateo 6:1 Castilian)

¿Qué te motiva a dar? ¿Cuál Es Tu Motivación?

Dios mide tus ofrendas con dos baremos:

a) Tus posibilidades; es decir, cuánto tienes.

b) tus motivos; la razón de dar.

“Guardaos de hacer el bien movidos tan sólo por el ansia de que la gente os vea, porque en ese caso no recibiréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos… que ni siquiera tu mano izquierda sepa lo que hace tu derecha; así tu limosna será secreta, y tu Padre, que ve lo secreto, te recompensará en público” (Mateo 6:1-4 Castilian).

Tenemos dos ejemplos que ilustran lo que quiso decir Jesús.

Primer ejemplo:

En 1977 un matrimonio decidió donar los tres millones de dólares necesarios para construir un nuevo parque zoológico para niños en el Parque Central de Nueva York. Pero surgieron problemas porque la placa en la que iban a inscribir sus nombres, reconociendo su contribución, no era suficientemente grande.

Además, existía ya en el lugar una placa mayor en honor de otra pareja que había donado medio millón de dólares hacía treinta años para construir el zoo original. Se propuso que los nombres de los primeros benefactores fueran remplazados por los segundos. Pero cuando la comisión encargada del parque rechazó tal propuesta, el matrimonio retiró su donativo.

Segundo ejemplo:

Se dice que Carlos Spurgeon y su esposa vendían los huevos de sus gallinas, pero nunca los regalaban. Decían siempre, hasta a sus familiares más cercanos: ‘Te damos huevos si los pagas.’ Debido a tal costumbre, los Spurgeons se crearon la reputación de tacaños.

Sólo se supo la verdad tras la muerte de la señora Spurgeon. Resultó que todas las ganancias de la venta de los huevos se dedicaban a sustentar a dos viudas ancianas. Estaba claro que a esta pareja le importaba más la opinión de Dios respecto a sus ofrendas que la de la gente.