1. La lectura de la Biblia. A través de este libro Dios nos habla. Nos muestra cómo quiere que vivamos, nos alienta y nos reprende si es necesario. ¿Cómo obedecer a Dios sin antes escucharlo, leyendo su Palabra?

2. La oración. Consiste en hablar a Dios simplemente, en exponerle lo que nos preocupa y agradecerle por todos sus dones. La oración nos permite mantener una verdadera relación con nuestro Creador y Padre a través de Jesucristo.

3. La relación con otros cristianos. Así como un tizón no puede permanecer fuera del fuego sin apagarse, un cristiano no puede permanecer mucho tiempo sin relacionarse con sus hermanos y hermanas en la fe.

4. El testimonio. Si conocemos una buena nueva, ¿no es natural anunciarla a otrosí Hablemos, pues, a las personas que nos rodean, comenzando por nuestros familiares, de nuestro Dios y de la salvación que él nos concedió. ¿Nos contentaremos con ser salvos únicamente, o aceptaremos estos cuatro consejos para que nuestra vida cristiana pueda florecer plenamente?

       ?La piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera? (1 Timoteo 4:8).