El Lenguaje de la fe, la palabra de Dios

La muerte y la vida están en poder de la lengua (Proverbios 18:21).

Deseo compartir contigo una clave de vida: No hables sin pensar. No digas cosas que estén en contra de la Palabra de Dios. Yo sé que estas normas no son fáciles de cumplir, pero la vida y la muerte depende de lo que digas.

La Biblia dice: «La muerte y la vida están en el poder de la lengua». Eso significa que puedes bendecirte con las palabras que salen de tu boca. Mira lo que dice la palabra de Dios «El que se bendijere en la tierra, en el Dios de verdad se bendecirá; y el que juraré en la tierra, por el Dios de verdad jurará; porque las angustias primeras serán olvidadas, y serán cubiertas de mis ojos» (Isaías 65:16).

Analizaremos 2 principios de vida importantes en la Biblia:

(1) Tus propias palabras tienen más poder para influenciarte que las palabras de cualquier otra persona

Una verdad poderosa es que no importa lo que los otros dicen de ti, sino lo que te dices a ti mismo cuando ellos terminan de hablar. Así que, al final de todo: ¡tú siempre tienes la última palabra!

(2) Nunca Seguirás El Propósito de Dios mientras sigas viviendo en el pasado

No puedes deshacer tu pasado, así que no lo revivas una y otra vez en tu cabeza. Dios dijo: No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad (Isaías 43:18-19).

Hoy es el tiempo para entrar en acuerdo con Dios, comienza a decir lo que él dice de ti, esto es muy importante. Así que tus palabras, desde que te levantas de la cama, hasta que duerme por la noche, no solo tienen poder sobre todo tu día, sino también, en los planes y la guía de Dios en tu vida. Si tienes tiempo orando a Dios por una respuesta, puedes ayudar a lo que sucederá alineando todo con lo que Dios dice. Así que piensa bien cuando palabras salgan de tu boca.

Aquí algunos versículos bíblicos para profundizar tu estudio: 1 Reyes 12-13, Mateo 13:47-58, Salmos 82, Proverbios 12:18-19