DEVOCIONAL
«Entonces Josué respondió a la casa de José, a Efraín y a Manasés: Tú eres un gran pueblo y tienes un gran poder: no tendrás una sola parte, sino que aquel monte será tuyo, pues aunque es un bosque, tú lo desmontarás y lo poseerás hasta sus límites más lejanos; porque tu arrojarás al cananeo, aunque tenga carros de hierro y aunque sea fuerte» (Josué 17: 17-18)
Dios dotó de dones, habilidades, talentos y creatividad al ser humano. Un buen padre descubre y motiva a su hijo a desarrollar su persona. Un buen líder conoce a su gente y la estimula a progresar.
Ayer vimos que dos tribus de Israel no pudieron expulsar al cananeo; hoy vemos que Josué anima a las tribus de Efraín y Manasés; que son un gran pueblo que tiene mucho poder y que incluso ese monte que no podían conquistar era de ellos, y que además arrojarían al terrible enemigo cananeo, aunque sea fuerte.
Que tremendas palabras llenas de aliento y desafío; de entusiasmo y vida. ¿Por qué? Porque Josué sabía del potencial de su gente y sobre todo contaban con el Todopoderoso para triunfar contra el enemigo.
Usted y yo de alguna manera tenemos influencia sobre un grupo de personas y debemos hacerlos para bien de ellos. Debemos motivar, animar al desconsolado, ayudar al caído, y necesitado comprensión.
A más de esto, somos importantes para Dios. Eso no debe hacernos orgullosos ni caer en el complejo de inferioridad. Usted tiene potencial, usted es creación de Dios para su alabanza y su gloria.
Sigamos sirviendo al Señor, porque somos un pueblo con poder para servir a nuestro país, y a su iglesia. Deje que el Espíritu Santo controle su vida y ore para seguir edificando al pueblo de Dios.
ORACIÓN:
«Señor gracias por los dones y talentos que nos has dado, que podamos usarlos para la Gloria de tu nombre?»
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