PROVERBIOS 13:17 El mal mensajero acarrea desgracia; Mas el mensajero fiel acarrea salud.

En las diversas relaciones interpersonales, sea en la familia, el trabajo, la iglesia o el club, siempre hay personas que se caracterizan por su modo de hablar. No me refiero al acento típico o las palabras cotidianas regionales, sino a la clase de palabras negativas o destructoras que utilizan. Esas palabras son mucho mas dañinas que las malas palabras. Esas personas son mensajeras de desgracia pues en sus palabras fluye la discordia, el chisme, la murmuración, la queja, el negativismo. Son personas que cuando llegan a cierto lugar «contaminan» el ambiente con sus dichos y palabras. Son realmente mensajeros que acarrean desgracia a los oyentes.
Estas personas por cierto no soy muy bienvenidas en ningún lugar.
Quizás nosotros no podamos evitar que otros sean mensajeros que acarrean desgracia, pero si podemos decidir ser mensajeros fieles que acarrean salud y bendición a los demas.
Como cristiano Dios lo ha diseñado a usted para que sea un canal de bendición hacia otros con su forma de hablar. Ultimamente usted se ha dado cuenta que lentamente se ha estado transformando en un mensajero que trae palabras destructivas y poco edificantes. ¡Haga un alto en este momento y cambie de canal! ¡Pase del lado de los mensajeros fieles que traen bendición con sus dichos y palabras!

Ritchie Pugliese

       Antonio Gudiño