Misioneros Liderados por Franklin Graham Predican y Bautizan en Zonas Remotas de Alaska

En una emocionante muestra de fe y valentía, misioneros liderados por el pastor Franklin Graham, presidente de la organización de misiones humanitarias Samaritan’s Purse, llevaron a cabo una inusual pero inspiradora ceremonia de bautismo en las heladas aguas del lago Clark, en el remoto estado de Alaska. El evento, que tuvo lugar el pasado día, fue la culminación de la «Operación Sanación para Nuestros Patriotas», una iniciativa de Samaritan’s Purse enfocada en brindar apoyo espiritual y emocional a veteranos de las Fuerzas Armadas de EE. UU. que residen en zonas aisladas de este vasto territorio.

La misión de Samaritan’s Purse, una organización reconocida por su labor humanitaria en todo el mundo, combina la predicación del Evangelio con acciones de ayuda y asistencia social dirigidas a víctimas de desastres naturales y a aquellos que enfrentan desafíos significativos, como los veteranos de guerra. En esta ocasión, se centraron en llevar el mensaje de la fe a un grupo de valientes excombatientes que han optado por dar el siguiente paso en su camino espiritual al declarar públicamente su fe en Jesucristo a través del bautismo.

El pastor Franklin Graham, hijo del renombrado evangelista Billy Graham, compartió la noticia en sus redes sociales, donde expresó su gratitud y alegría por este evento significativo. «¡Ayer celebramos 10 bautismos en la Operación Sanación para Nuestros Patriotas de Samaritan’s Purse en las heladas aguas del lago Clark, en Alaska!», escribió Graham. «Damos gracias a Dios por cada uno de estos veteranos heridos y sus cónyuges que han elegido dar este siguiente paso de proclamar públicamente su fe en Jesucristo. Por favor, únanse a mí en la oración por estas parejas», agregó.

Este acto de fe en medio de condiciones extremas no solo es testimonio de la fortaleza espiritual de estos individuos, sino que también destaca la dedicación de Samaritan’s Purse para llevar el mensaje del Evangelio a las comunidades más remotas y desfavorecidas de Estados Unidos. Al citar 1 Pedro 1:3, el pastor Franklin Graham concluyó su mensaje en las redes sociales: «¡Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo! En su gran misericordia nos ha regenerado a una esperanza viva mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos.»

La historia de estos valientes veteranos en Alaska que han elegido dar un paso tan significativo en su fe es verdaderamente inspiradora. El acto de ser bautizado en aguas heladas es un recordatorio de que la fe puede superar cualquier obstáculo, incluso las circunstancias más desafiantes.

La Biblia nos habla en Mateo 28:19-20 sobre la importancia del bautismo en la Gran Comisión: «Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado». Estas palabras de Jesús nos muestran la trascendencia del bautismo como una declaración pública de nuestra fe en Él.

Los valientes hombres y mujeres que participaron en esta ceremonia en Alaska nos recuerdan que no hay lugar demasiado remoto, ninguna circunstancia demasiado difícil y ningún desafío demasiado grande que pueda detener el avance del Evangelio. Como creyentes, estamos llamados a ser testigos valientes, sin importar dónde nos encontremos.

Esta historia también nos desafía a apreciar nuestra propia libertad religiosa y a orar por aquellos en todo el mundo que enfrentan persecución por su fe. En muchos partes, profesar la fe en Jesucristo puede tener graves consecuencias. Recordemos la importancia de la oración y el apoyo a aquellos que luchan por su fe en circunstancias difíciles.

Para culminar, esta historia nos llama a reflexionar sobre nuestra propia fe y compromiso. ¿Estamos dispuestos a dar pasos audaces en nuestra relación con Dios, incluso cuando eso signifique enfrentar dificultades? ¿Estamos dispuestos a proclamar públicamente nuestra fe en Jesucristo en medio de un mundo que a veces se opone a nuestras creencias? Que esta historia nos inspire a vivir nuestra fe con valentía y a estar dispuestos a enfrentar cualquier desafío por amor a Cristo.