Título: Bendice, alma mía, a Jehová

Pasaje clave: Salmos 103:1-5

“Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. Él es quien perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias; el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y misericordias; el que sacia de bien tu boca, de modo que te rejuvenezcas como el águila” (Salmos 103:1-5).

La vida está llena de altos y bajos, y en medio de esas circunstancias, es fácil olvidar las bendiciones que Dios nos ha dado. En el Salmo 103, el salmista nos anima a recordar y bendecir a Jehová por todos sus beneficios y bondades.

Imagina un águila majestuosa volando en lo alto, sobrevolando las montañas y valles. Sus alas se extienden con fuerza, y su vista aguda le permite ver todo lo que se encuentra a su alrededor. De igual forma, cuando bendecimos a Jehová y recordamos sus bondades, nuestras almas son renovadas y rejuvenecidas como el águila, permitiéndonos enfrentar las dificultades de la vida con una perspectiva eterna.

Hay 3 versículos bíblicos que diariamente tocan mi corazón y los comparto contigo:

Jehová perdona nuestras iniquidades: “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad” (1 Juan 1:9).

Jehová sana nuestras dolencias: “Jehová, mi roca y mi fortaleza, mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio” (Salmos 18:2).

Jehová rescata nuestra vida del hoyo: “El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, y los defiende” (Salmos 34:7).

Jehová nos corona de favores y misericordias: “Porque como los cielos son más altos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos” (Isaías 55:9).

Bendecir a Jehová es una elección que hacemos cada día, independientemente de nuestras circunstancias. Cuando nos enfocamos en sus bondades y beneficios, nuestras almas son fortalecidas, y nuestra fe en Dios se profundiza. En los momentos difíciles, recordemos bendecir a Jehová y darle gracias por su amor, misericordia y gracia. Al hacerlo, seremos como el águila que se renueva y vuela alto, con una perspectiva eterna que nos permite enfrentar cualquier desafío.

Oración: Señor Jehová, te bendecimos y agradecemos por tus innumerables beneficios en nuestras vidas. Ayúdanos a recordar siempre tu amor, misericordia y gracia, y a mantener nuestra fe en ti, incluso en medio de las pruebas. Renueva nuestras almas como el águila y danos la fuerza para enfrentar los desafíos de la vida con una perspectiva eterna. En el nombre de Jesús, amén.

Aplicación práctica: Esta semana, toma tiempo cada día para reflexionar sobre las bendiciones y beneficios que Dios te ha dado. Puedes escribirlos en un diario, compartirlos con un amigo o simplemente dar gracias en oración. Al enfocarte en la bondad de Dios, permites que tu alma sea renovada y fortalecida.

Las dificultades de la vida pueden nublar nuestra visión de las bendiciones de Dios. Es importante rodearnos de personas que nos animen y nos recuerden la fidelidad de Dios. Comparte tus luchas y victorias con amigos, familiares o miembros de tu iglesia, y apóyense mutuamente en la fe.

El salmista nos anima a bendecir a Jehová en todo momento y recordar sus bondades y beneficios. Al hacerlo, nuestras almas son renovadas, y nuestra fe en Dios se profundiza. A medida que enfrentamos las dificultades de la vida, recordemos siempre dar gracias y bendecir a Jehová, y permitir que Él nos renueve y fortalezca.

“Jehová te bendiga, y te guarde; Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz” (Números 6:24-26).