30.7 C
Miami
miércoles, julio 17, 2024
Más


    Efesios 6 - Castellano Antiguo (Nuevo Testamento)

    1. Hijos, honrad al Señor obedeciendo a vuestros padres, porque esto es justo.

    2. Precisamente el primer mandamiento que lleva consigo una promesa es: "Honra a tu padre y a tu madre,

    3. para que goces de una larga vida sobre la tierra".

    4. En cuanto a vosotros, padres, no provoquéis la ira de vuestros hijos, antes bien educadlos y, cuando sea necesario, amonestadlos en la disciplina llena de amor del Señor. Deberes de los esclavos y de sus amos

    5. Esclavos, obedeced a vuestros amos terrenales, y servidlos con diligencia lo mejor que podáis, como si sirvierais a Cristo.

    7. Trabajad de buena gana y con limpia conciencia; no como esos que solo se esmeran en el trabajo cuando el amo los mira, sino como si trabajarais para Cristo, cumpliendo de todo corazón la voluntad de Dios.

    8. Pensad que el Señor nos pagará el bien que hagamos, tanto si somos esclavos como si somos libres.

    9. Y vosotros, amos, tratadlos bien. Dejad las amenazas y recordad que el Señor vuestro y de ellos, que está en los cielos, no actúa con favoritismos. La armadura de Dios

    10. Dicho esto, os recuerdo también que vuestra fortaleza ha de emanar del gran poder del Señor, que está en vosotros.

    11. Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis resistir con firmeza las asechanzas del diablo,

    12. porque nuestra lucha no es contra seres de carne y hueso, sino contra potestades y autoridades, contra los que gobiernan las tinieblas de este mundo y también contra los espíritus malignos que habitan regiones celestiales.

    13. Revestíos de la armadura completa de Dios, para que podáis resistir los ataques enemigos en el día malo; así, cuando la batalla termine, vosotros seguiréis en pie.

    14. Permaneced firmes, ceñidos con el cinturón de la verdad, vestidos con la coraza de la rectitud

    15. y calzados y aprestados vuestros pies con el evangelio de la paz.

    16. Embrazad, sobre todo, el escudo de la fe, para que en él podáis apagar todas las flechas ardientes del maligno.

    17. Cubríos la cabeza con el casco de la salvación y empuñad la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios.

    18. Orad en todo tiempo, sin cesar, velando en ello con perseverancia. Elevad al Señor vuestras oraciones y ruegos con la ayuda del Espíritu Santo. Interceded por todos los que pertenecen a la familia de Dios;

    19. y hacedlo también por mí, para que Dios ponga en mi boca las palabras oportunas y pueda yo anunciar y dar a conocer con valentía el misterio del evangelio.

    20. Estoy en prisión, encadenado, pero soy embajador del Señor. Por eso, pedidle que me dé el valor necesario para hablar de él con libertad también entre los muros de esta cárcel. Saludos finales

    21. Tíquico, mi muy querido hermano y fiel colaborador en la obra del Señor, os contará cómo me van las cosas, y lo que hago.

    22. Precisamente para eso os lo envío, pues quiero que tengáis noticias mías y que levante vuestro ánimo con sus palabras.

    23. Amados hermanos, tened paz, y también amor y fe de parte de Dios Padre y del Señor Jesucristo.

    24. Que la gracia de Dios sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor inquebrantable.