1 Crónicas 26 - Biblia Castilian 2003

Porteros y oficiales

1. Ésta era la distribución de los porteros. De los core tas: Meselem as, hijo de Coré, de los hijos de Abiasaf.

2. Hijos de Meselem as: el primogénito, Zacar as; el segundo, Yediael; el tercero, Zebad as; el cuarto, Yatniel;

3. el quinto, Elán, el sexto, Juan; el séptimo, Elyoenay.

4. Hijos de Obededón: el primogénito Sema as; el segundo, Yozabad; el tercero Joaj; el cuarto, Sacar; el quinto, Natanael;

5. el sexto, Amiel; el séptimo, Isacar; el octavo, Peuletay, pues Dios lo hab a bendecido.

6. A Sema as, hijo suyo, le nacieron hijos que fueron jefes de sus casas paternas, porque eran hombres esforzados.

7. Hijos de Sema as: Otn, Rafael, Obed, Elzabad y sus hermanos, hombres valerosos, Elihú y Semaqu as.

8. Todos éstos eran hijos de Obededón. Ellos, sus hijos y sus hermanos eran vigorosos, de gran eficacia para el servicio: sesenta y dos de Obededón.

9. Meselem as tuvo hijos y hermanos, hombres esforzados: dieciocho.

10. Josá, de los descendientes de Merar, también tuvo hijos: Simr, el primero; pues, aunque no fue el primogénito, su padre lo hab a constituido jefe.

11. Jilqu as, el segundo; Tebal as, el tercero; Zacar as, el cuarto. Los hijos y hermanos de Josá eran trece en total.

12. A estas clases de porteros, a los jefes varones, lo mismo que a sus hermanos, les fue encomendado el servicio de guardia en la casa de Yahveh.

13. Echaron suertes para cada puerta por casas paternas peque as y grandes.

14. La puerta oriental tocó en suerte a Selem as. Echaron luego suertes para Zacar as, hijo suyo, consejero ponderado, y le tocó la del norte.

15. A Obededón le tocó la del sur, y a sus hijos el pabellón de los almacenes.

16. A Sup n y a Josá les tocó la de occidente, con la puerta del Tocón, en el camino de subida, por lo que un puesto de guardia estaba frente al otro.

17. As, al oriente, hab a seis cada d a; al norte, cuatro cada d a; al sur, cuatro cada d a; y en el pabellón de los almacenes de dos en dos.

18. En el parbar, al occidente, cuatro para el camino de subida y dos para el parbar.

19. Éstas eran las clases de los porteros, entre los descendientes de los core tas y los hijos de Merar.

20. Los levitas, sus hermanos, estaban encargados de los tesoros del templo de Dios y de los tesoros de las cosas sagradas.

21. Los hijos de Ladán, descendientes de Guersón por la l nea de Ladán, ten an a los yejielitas como jefes de las casas paternas de Ladán, el guersonita.

22. Los hijos de Yejiel, Zetán y su hermano Joel, eran los encargados de los tesoros del templo de Yahveh.

23. Respecto de los amranitas, yisaritas, hebronitas y uzielitas,

24. Sebuel, hijo de Guersón, hijo de Moisés, era el superintendente de los tesoros.

25. Y sus hermanos, por las l nea de Eliezer, eran Rejab as, hijo suyo; Isa as, hijo suyo; Jorán, hijo suyo; Zicr, hijo suyo y Selomit, hijo suyo.

26. Selomit y sus hermanos estaban al frente de todos los tesoros de las cosas sagradas que hab an consagrado el rey David, los jefes de las casas paternas, los jefes de mil y de cien y los jefes del ejército.

27. Los hab an consagrado como bot n de guerra para sostener la casa de Yahveh.

28. Y todo lo que hab an consagrado Samuel, el vidente; Saúl, hijo de Quis, Abner, hijo de Ner; Joab, hijo de Servia: todo lo consagrado estaba a cargo de Selomit y sus hermanos.

29. De los yisaritas, Quenan as y sus hijos estaban encargados en Israel de los asuntos externos como escribas y jueces.

30. De los hebronitas, Jasab as y sus hermanos, hombres valerosos, en número de mil setecientos, estaban al frente de la administración de Israel al otro lado del Jordán, a occidente, para todos los asuntos de Yahveh y del servicio del rey.

31. El jefe de los hebronitas era Yer as. En el a o cuarenta del reinado de David se hicieron indagaciones sobre las genealog as de las casas paternas de los hebronitas, y se hallaron entre ellos hombres valerosos en Yazer de Galaad.

32. Sus hermanos, hombres valerosos, jefes de casas paternas, eran dos mil setecientos. El rey David los encargó de la administración de los rubenitas, gaditas y de la mitad de la tribu de Manasés para todas las cosas de Dios y los asuntos del rey.