Isaías 6 - Biblia Castilian 2003Visión y llamamiento de Isaías1. El a o de la muerte del rey Oz as, vi al Se or sentado en un trono alto y elevado. Las orlas de su vestido llenaban el templo. 2. Por encima de Él hab a serafines de pie, con seis alas cada uno: con dos se cubr an el rostro, con otras dos se cubr an hasta los pies y con los otras dos volaban. 3. Se gritaban el uno al otro: "¡Santo, Santo, Santo es Yahveh Sebaot; toda la tierra está llena de su gloria!". 4. Los quicios de los umbrales retemblaban al clamor de su voz y el templo se llenó de humo. 5. Yo dije: "¡Ay de m ! ¡Estoy perdido, pues soy hombre de labios impuros que vivo en un pueblo de labios impuros, y mis ojos han visto al rey, a Yahveh Sebaot!". 6. Voló entonces hacia m uno de los serafines, con una brasa encendida en su mano, que hab a tomado de encima del altar con unas tenazas; 7. y, tocando mi boca, dijo: "Mira, esto ha tocado tus labios: ha sido quitada tu culpa, está perdonado tu pecado". 8. Yo o la voz del Se or, que dec a: "¿A quién enviaré y quién irá por nosotros?". Aqu estoy yo - respond -, env ame. 9. "Ve - contestó él - y di a este pueblo: "Escuchad atentamente, pero no entendáis; mirad bien, pero no percibáis". 10. Embrutece el corazón de este pueblo, endurece sus o dos, ciega sus o dos, para que sus ojos no vean, ni oigan sus o dos, ni entienda su corazón y no se convierta y se cure". 11. "¿Hasta cuándo, Se or?" - pregunté -. Y él me respondió: "Hasta que queden las ciudades asoladas y sin habitantes, las casas sin hombres, el campo desolado como un desierto. 12. Yahveh alejará a los hombres y será grande la desolación en el pa s. 13. Y si aún queda en él una décima parte, volverá a ser consumida. Como el terebinto y la encina, que, talados, conservan un tocón: semilla santa será su tocón". |