Levítico 22 - Biblia Castilian 2003

Santidad de las ofrendas

1. Habló Yahveh a Moisés:

2. "Di a Aarón y a sus hijos que se abstengan de algunas ofrendas santas que me presentan los israelitas, y que no profanen mi santo nombre. Yo, Yahveh.

3. Diles: "Cualquier hombre de vuestro linaje, en todas vuestras generaciones, que se acerque en estado de impureza a las cosas santas que los israelitas consagran a Yahveh será extirpado de mi presencia. Yo, Yahveh".

4. Ninguno del linaje de Aarón que sea leproso o que tenga flujo comerá de las ofrendas sagradas hasta que se purifique. Quien haya tocado a alguien contaminado por el contacto de un cadáver, o haya tenido derrame seminal,

5. o haya tocado algún reptil que le ha impurificado, o a un individuo que le ha contagiado de alguna impureza suya, de cualquier clase que sea;

6. quien haya tocado algo de eso, será impuro hasta la tarde, y no comerá de las cosas santas antes de haberse ba ado.

7. A la puesta del sol quedará puro y entonces podrá comer de las cosas santas, pues son su alimento.

8. No comerá carne de animal muerto o despedazado, pues se contaminar a con ella. Yo, Yahveh.

9. Que guarden mis preceptos y no incurran en pecado, no sea que mueran por haber profanado las cosas santas. Yo, Yahveh, que los santifico.

10. Ningún extra o comerá cosa sagrada; ni el que habita en la casa del sacerdote ni el asalariado la comerán.

11. Pero si el sacerdote compra con dinero a una persona, ésta podrá comerla, lo mismo que los esclavos nacidos en su casa.

12. La hija de un sacerdote casada con un extra o no comerá de las cosas sagradas reservadas:

13. si la hija de un sacerdote, viuda o repudiada, no tiene descendencia y vuelve a la casa de su padre, como en su juventud, podrá comer del pan de su padre, pero ningún extra o lo comerá.

14. Quien por inadvertencia coma cosa sagrada, la restituirá al sacerdote con un quinto de más.

15. Los israelitas no profanarán las ofrendas santas, las que reservan para Yahveh;

16. pues, en caso de comerlas, cargar an sobre ellos una culpa que exige reparación. Porque soy yo, Yahveh, el que santifica estas ofrendas".

17. Habló Yahveh a Moisés:

18. "Di a Aarón, a sus hijos y a todos los israelitas: cualquier hombre de la casa de Israel y de los extranjeros residentes en Israel que quiera presentar su ofrenda, sea en cumplimiento de un voto o como ofrenda voluntaria de las que suelen ofrecerse a Yahveh en holocausto,

19. deberá ofrecer, para que sea aceptable, un macho sin defecto, ya sea de ganado mayor, de ovejas o de cabras.

20. No ofreceréis nada que tenga algún defecto, pues no os ser a aceptado.

21. Cuando alguno ofrezca a Yahveh un sacrificio de comunión de ganado mayor o menor en cumplimiento de un voto o como ofrenda voluntaria, la v ctima deberá ser perfecta y sin defecto, para que sea aceptada.

22. No ofreceréis a Yahveh ni pondréis encima del altar como manjar pasado por el fuego en honor de Yahveh ningún animal ciego, cojo, mutilado, ulcerado, sarnoso o ti oso.

23. Podrás ofrecer como sacrificio voluntario una cabeza de ganado mayor o menor hipertrofiada o raqu tica; pero estas v ctimas no serán aceptadas para los sacrificios hechos en cumplimiento de un voto.

24. No ofreceréis a Yahveh un animal que tenga los test culos aplastados, magullados, arrancados o cortados; no haréis eso en vuestra tierra.

25. Y no permitiréis que tales v ctimas sean ofrecidas de mano de un extranjero como alimento de vuestro Dios, pues su deformidad es un defecto y son, por tanto, inaceptables".

26. Dijo Yahveh a Moisés:

27. "Cuando nazca un ternero, cordero o cabrito, quedará siete d as junto a su madre. Desde el octavo d a en adelante es ya aceptable como manjar pasado por el fuego en honor de Yahveh.

28. No inmolaréis en un mismo d a una vaca o una oveja junto con su cr a.

29. Cuando inmoléis un sacrificio de acción de gracias a Yahveh, hacedlo de manera que sea aceptable.

30. Se comerá el mismo d a, sin dejar nada para la ma ana siguiente. Yo, Yahveh.

31. Guardad mis mandamientos y ponedlos en práctica. Yo, Yahveh.

32. No profanaréis mi santo nombre, para que yo sea santificado en medio de los israelitas. Yo soy Yahveh, que os santifico;

33. el que os sacó de la tierra de Egipto para ser vuestro Dios. Yo, Yahveh".