26.4 C
Miami
sábado, agosto 17, 2024
Más


    Oseas 9 - Biblia Castilian 2003

    Castigo de la persistente infidelidad de Israel

    1. No te alegres, Israel, no te goces como las naciones, pues te prostituiste abandonando a tu Dios, fuiste en busca del salario de prostitución por todas las eras de trigo.

    2. Ni la era ni el lagar los alimentarán; y el mosto les fallará.

    3. No habitarán en la tierra de Yahveh: Efra n volverá a Egipto y en Asiria comerán manjar impuro.

    4. No ofrecerán libaciones de vino a Yahveh ni a él le gustarán sus sacrificios. Como pan de duelo será su pan, cuantos lo coman se contaminarán; sólo para ellos será su pan pues no entrará en la casa de Yahveh.

    5. ¿Qué haréis el d a de la solemnidad, el d a de la fiesta de Yahveh?

    6. Se evaden de la devastación, pero Egipto los recoge y Menfis los sepulta. Sus tesoros de plata los heredará la ortiga; cardos crecerán en sus tiendas.

    7. Llegan los d as del castigo, llegan los d as de la venganza. ¡Que lo sepa la gente de Israel! ¡Es un loco el profeta, desvar a este inspirado! Por la magnitud de tus iniquidades, por tu gran hostilidad en contra de él.

    8. Junto a la tienda del profeta esp a Efra n: es lazo de pajarero en todos sus caminos, hostilidad en la casa de su Dios.

    9. Llegaron al fondo de la corrupción como en los d as de Guibeá; Yahveh recuerda su culpa, castigará sus pecados.

    10. Como uvas en el desierto encontré a Israel; como breva en higuera vi a vuestros padres. Llegaron a Baal Peor y a la infamia se entregaron; se hicieron abominables como las cosas que amaron.

    11. Efra n es como un ave: pasa volando su gloria; ya no hay nacimiento, ni embarazo, ni concepción.

    12. Si sacan adelante a sus hijos, se los quitaré antes de que lleguen a ser hombres. S; ¡ay también de ellos, cuando de ellos me aparte!

    13. Efra n, por lo que veo, convierte a sus hijos en pieza de caza, pues Efra n los hace salir al encuentro del verdugo.

    14. Dales, Yahveh... ¿Qué les darás? Dales senos estériles y pechos resecos.

    15. En Guilgal está toda su maldad: s; all los odié. Por la maldad de sus acciones los arrojaré de mi casa. No volveré a amarlos; todos sus jefes son rebeldes.

    16. Efra n está herido, su ra z se seca, no dará más fruto. Aunque den a luz, yo mataré los tesoros de su vientre.

    17. Mi Dios los rechazará porque no lo escucharon: andarán errantes entre las naciones.