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jueves, julio 18, 2024
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    1 Crónicas 10 - El Libro del Pueblo de Dios

    Muerte de Saúl y de sus hijos

    1. Los filisteos entablaron combate con Israel. Los hombres de Israel huyeron ante ellos y cayeron heridos de muerte en el monte Gelboé.

    2. Los filisteos persiguieron de cerca a Saúl y a sus hijos y mataron a Jonatán, Abinadab y Malquisúa, los hijos de Saúl.

    3. El peso del combate recayó entonces sobre Saúl. Los arqueros lo descubrieron, y fue herido por ellos.

    4. Saúl dijo a su escudero: "Saca tu espada y traspásame, no sea que vengan esos incircuncisos, para vergüenza mía". Pero su escudero no quiso hacerlo, porque tenía mucho miedo. Entonces Saúl tomó la espada y se arrojó sobre ella.

    5. Al ver que Saúl estaba muerto, también su escudero se echó sobre su espada y murió.

    6. Así murieron Saúl y sus tres hijos; toda su casa murió al mismo tiempo.

    7. Todos los hombres de Israel que estaban en el valle, al ver que la gente huía y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron sus ciudades y se dieron a la fuga. Luego vinieron los filisteos y se establecieron allí.

    8. Al día siguiente, cuando llegaron los filisteos para despojar a las víctimas, encontraron a Saúl y a sus hijos tendidos sobre el monte Gelboé.

    9. Entonces despojaron a Saúl y se llevaron su cabeza y sus armas. Luego enviaron mensajeros por todo el país de los filisteos, para anunciar la buena noticia a sus ídolos y al pueblo.

    10. Depositaron las armas de Saúl en el templo de dios y colgaron su cabeza en el templo de Dagón.

    11. Cuando todo Iabés de Galaad oyó lo que los filisteos habían hecho a Saúl,

    12. todos los hombres valientes emprendieron la marcha, retiraron el cadáver de Saúl y los cadáveres de sus hijos, y se los llevaron a Iabés. Allí sepultaron sus huesos bajo el Terebinto de Iabés y ayunaron siete días.

    13. Así murió Saúl, por haberse rebelado contra el Señor, no observando su palabra, y por haber evocado y consultado al espíritu de un muerto,

    14. en lugar de consultar al Señor. Por eso el Señor lo hizo morir y transfirió la realeza a David, hijo de Jesé.