Juan 9 - Scio de San Miguel (Solo los Evangelios)Jesús sana a un ciego de nacimiento1. Y al pasar Jesús, vio un hombre ciego de nacimiento. 2. Y le preguntaron sus discípulos: "Maestro, ¿quién pecó, este, o sus padres, por haber nacido ciego(a)?” 3. Respondió Jesús: "Ni este pecó, ni sus padres; mas para que las obras de Dios(b) se manifiesten en él. 4. Es necesario que yo obre las obras de aquel que me envió, mientras que es de día(c); vendrá la noche(d), cuando nadie podrá obrar(e). 5. Mientras que estoy en el mundo, luz soy del mundo”. 6. Cuando esto hubo dicho, escupió en tierra, e hizo lodo con la saliva, y ungió con el lodo sobre los ojos del ciego. 7. Y le dijo: "Ve, lávate en la piscina(f) de Siloé” (que quiere decir Enviado(g)). Se fue pues, y se lavó, y volvió con vista. 8. Los vecinos, y los que le habían visto antes pedir limosna(h), decían: "¿No es este el que estaba sentado, y pedía limosna?” Los unos decían: "Este es”. 9. Y los otros: "No es ese, sino que se le parece”. Mas él decía: "Yo soy”. 10. Y le decían: "¿Cómo te fueron abiertos los ojos?” 11. Respondió él: "Aquel hombre, que se llama Jesús, hizo lodo, y ungió mis ojos, y me dijo: ‘Ve a la piscina de Siloé, y lávate’. Y fui, me lavé, y veo”. 12. Y le dijeron: "¿En dónde está aquel?” Respondió él: "No sé”. Los fariseos interrogan al ciego sanado13. Llevaron a los fariseos al que había sido ciego. 14. Y era sábado, cuando hizo Jesús el lodo, y le abrió los ojos. 15. Y de nuevo le preguntaban los fariseos, cómo había recibido la vista. Y él les dijo: "Lodo puso sobre mis ojos, y me lavé, y veo”. 16. Y decían algunos de los fariseos: "Este hombre no es de Dios, pues que no guarda el sábado”. Y otros decían: "¿Cómo puede un hombre pecador hacer estos milagros?” Y había disensión entre ellos. 17. Y vuelven a decir al ciego: "Y tú ¿qué dices de aquel que abrió tus ojos?” Y él dijo: "Que es profeta(i)”. 18. Mas los Judíos no creyeron de él, que hubiese sido ciego, y que hubiese recibido la vista, hasta que llamaron a los padres del que había recibido la vista. 19. Y les preguntaron, y dijeron: "¿Es este vuestro hijo, el que vosotros decís que nació ciego? Pues ¿cómo ve ahora(j)?” 20. Sus padres les respondieron, y dijeron: "Sabemos que este es nuestro hijo, y que nació ciego. 21. Mas no sabemos cómo ahora tenga vista; o quién le haya abierto los ojos, nosotros no lo sabemos. Preguntadlo a él; edad tiene; que hable él por sí mismo”. 22. Esto dijeron los padres del ciego, porque temían a los Judíos; porque ya habían acordado los Judíos, que si alguno confesase a Jesús por Cristo, fuese echado de la sinagoga(k). 23. Por eso dijeron sus padres: "Edad tiene; preguntadle a él”. 24. Volvieron pues a llamar al hombre, que había sido ciego, y le dijeron: "Da gloria a Dios(l). Nosotros sabemos que ese hombre es pecador”. 25. El les dijo: "Si es pecador, no lo sé. Una cosa sé, que habiendo yo sido ciego, ahora veo(m)”. 26. Y ellos le dijeron: "¿Qué te hizo? ¿Cómo te abrió los ojos?” 27. Les respondió: "Ya os lo he dicho, y lo habéis oído(n). ¿Por qué lo queréis oír otra vez? ¿Por ventura queréis vosotros también haceros sus discípulos?” 28. Y le maldijeron, y dijeron: "Tú seas su discípulo; que nosotros somos discípulos de Moisés. 29. Nosotros sabemos que habló Dios a Moisés; mas este no sabemos de dónde sea”. 30. Aquel hombre les respondió, y dijo(o): "Cierto que es cosa maravillosa, que vosotros no sabéis de dónde es, y abrió mis ojos. 31. Y sabemos que Dios no oye a los pecadores(p); mas si alguno es temeroso de Dios, y hace su voluntad, a este oye. 32. Nunca fue oído, que abriese alguno los ojos de uno que nació ciego. 33. Si este no fuese de Dios, no pudiera hacer cosa alguna”. 34. Respondieron, y le dijeron: "¿En pecado eres nacido todo, y tú nos enseñas(q)?” Y le echaron fuera(r). Ceguera espiritual35. Oyó Jesús que le habían echado fuera; y cuando le halló, le dijo: "¿Crees tú en el Hijo de Dios?” 36. Respondió él, y dijo: "¿Quién es, Señor, para que crea en él(s)?” 37. Y Jesús le dijo: "Y lo has visto(t), y el que habla contigo, ese mismo es”. 38. Y él dijo: "Creo, Señor”. Y postrándose, le adoró. 39. Y dijo Jesús: "Yo vine a este mundo para juicio: para que vean los que no ven; y los que ven sean hechos ciegos(u)”. 40. Y lo oyeron algunos de los fariseos, que estaban con él, y le dijeron: "Pues qué, ¿nosotros somos también ciegos?” 41. Jesús les dijo: "Si fueseis ciegos, no tendríais pecado(v); mas ahora porque decís: ‘Vemos’, por eso permanece vuestro pecado”. |